El presidente Donald Trump fue absuelto en el Senado después de un histórico juicio de impeachment que mostró las divisiones en la clase política de Estados Unidos. El mandatario fue liberado de sus cargos con el apoyo de todos los republicanos excepto uno y el rechazo de todos los demócratas.
De los 100 senadores, 52 declararon al presidente inocente de abuso de poder y 53 negaron que haya obstruido la labor del Congreso. Mitt Romney es el senador republicano que apoyó la acusación por abuso de confianza pública.
Poco después de la absolución, Trump publicó en Twitter un video en el que se presenta como un político que gana las elecciones en diferentes años hasta cerrar con la palabra 4eva (por siempre). El republicano hablará este jueves desde la Casa Blanca sobre los resultados del impeachment.
Mientras tanto, la portavoz de la Casa Blanca Stephanie Grisham calificó el juicio como un proceso corrupto e insinuó que debería haber un castigo para el fiscal Adam Schiff.
“La farsa de intento de juicio político tramada por los demócratas acabó con la completa reivindicación y exoneración del presidente. El Senado votó para rechazar los cargos políticos, que no tenían base, y sólo los rivales del presidente —todos los demócratas y un candidato presidencial republicano que fracasó— votaron a favor de esos cargos manufacturados”, afirmó la portavoz en un comunicado.
El proceso comenzó desde el 24 de septiembre pasado, cuando la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi anunció el inicio de una investigación por la llamada que sostuvo Trump con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, en julio de 2019.
En esa llamada, el mandatario presuntamente presionó a su homólogo ucraniano para que realizara una investigación en contra del exvicepresidente Joe Biden y su hijo a cambio de liberar 400 millones de dólares en asistencia militar.
Los demócratas acusaron a Trump de abuso de poder por retener la ayuda a Ucrania para presionar y forzar que su gobierno investigara al exvicepresidente que busca la nominación demócrata a las elecciones presidenciales de noviembre. También lo culparon de obstaculizar la investigación sobre este suceso.
La mayoría demócrata de la Cámara Baja logró aprobar dos cargos en contra de Trump el 18 de diciembre del año pasado. El organismo legislativo acusó al mandatario de abuso de poder y de obstrucción al Congreso.
El caso estuvo en el Senado 20 días desde que los senadores juraron ante el presidente del Supremo que actuarían con justicia y conforme a la Constitución hasta la absolución de Trump.
Durante el proceso, los senadores republicanos votaron en contra de la participación de testigos y la presentación de nuevas pruebas en las audiencias públicas del juicio
“Una mayoría simple de senadores negó el derecho a examinar evidencias relevantes, llamar a testigos, revisar documentos y tratar de hacer un impeachment al presidente. Es el primer impeachment de la historia sin testigos. La absolución en un juicio injusto, no vale nada”, dijo Chuck Schumer, líder demócrata en el Senado.
La presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, quien fue una de las grandes figuras dentro del juicio político, afirmó que el Senado republicano traicionó la Constitución de Estados Unidos al absolver a Trump.
“El presidente sigue siendo una amenaza constante para la democracia estadounidense, con su insistencia en que está por encima de la ley y que puede corromper las elecciones si lo desea”, dijo la demócrata.
Por su parte, la excandidata presidencial Hillary Clinton advirtió que Estados Unidos entra a un territorio peligroso para la democracia con la decisión del Senado y ahora tendrán que trabajar juntos para restaurarla.
En cambio, Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en la Cámara Alta, dijo que el juicio había sido una pérdida política para los demócratas.
“Pensaron que esto era una gran idea y al menos en el corto plazo ha sido un error político colosal”, aseguró el republicano.
No es la primera vez que hay investigaciones para impeachment
Trump tiene investigaciones en su espalda desde que comenzó su mandato hace tres años. Su absolución sobre el caso ucraniano es la segunda vez en diez meses que supera una amenaza a su presidencia.
Por ejemplo, en marzo de 2019, el fiscal especial Robert Mueller no encontró pruebas definitivas sobre una interferencia por parte de Rusia en las elecciones de 2016.
Tras salir absuelto del impeachment, Trump regresa a su campaña para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre con una aprobación del 42 por ciento, de acuerdo con la encuesta más reciente de Reuters e Ipsos, realizada entre lunes y martes. En septiembre, cuando la Cámara de Representantes lanzó la investigación, su aceptación era del 43 por ciento.
Trump es el tercer presidente de Estados Unidos en ser juzgado y absuelto en el Senado. Andrew Johnson fue liberado de sus cargos en 1868 y Bill Clinton en 1999.