El consumo de fentanilo provoca más muertes que cualquier otra droga en Estados Unidos y el crimen organizado mexicano es uno de los culpables. La situación es preocupante porque cada año mueren más personas por sobredosis de este opioide sintético.
Se trata de un analgésico aprobado para el tratamiento del dolor severo. Tiene un efecto 50 a 100 veces más potente que la morfina. Se vende ilegalmente en forma de polvo, sobre papel secante, en envases de gotas para los ojos, rociadores nasales o en pastillas parecidas a las de otros opioides recetados.
En 2018, más de 32 mil estadounidenses fallecieron después de consumir fentanilo o uno de sus parientes químicos cercanos, de acuerdo con los registros preliminares de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Ninguna otra droga en la historia moderna de Estados Unidos mató a más personas en un año.
Además, las muertes por sobredosis de este fármaco aumentaron más del 94 por ciento entre 2012 y 2018, según los datos del Sistema Nacional de Estadísticas Vitales de Estados Unidos. El año pasado, el 38.9 de personas que murieron por consumir drogas clasificadas como peligrosas ingirieron fentanilo.
El crimen organizado mexicano es uno de culpables de estas muertes. La Administración Federal contra las Drogas (DEA) informó este lunes que las organizaciones criminales mexicanas falsifican medicamentos que se venden con receta para distribuir fentanilo en cantidades letales.
“Los cárteles mexicanos de la droga están fabricando cantidades masivas de píldoras que contienen fentanilo, un opioide sintético peligroso”, cita un comunicado de la dependencia federal estadounidense.
La DEA descubrió que el 27 por ciento de una muestra de tabletas incautadas en todo el país entre enero y marzo de 2019 contenía dosis letales de fentanilo.
“Las píldoras falsificadas que contienen fentanilo y heroína con fentanilo son responsables de miles de muertes relacionadas con opioides en los Estados Unidos cada año”, detalló el administrador interino de la DEA Uttan Dhillon en el comunicado.
Los agentes fronterizos de Estados Unidos siguen interceptando cantidades crecientes de fentanilo. En enero, informaron sobre su mayor incautación: 254 libras de polvo y píldoras, escondidas en un camión que transportaba pepinos a Nogales, Arizona.
Desde el año pasado, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), dependiente de la ONU, informó sobre el creciente tráfico de fentanilo de México a Estados Unidos.
En su último informe, el JIFE advierte que la cantidad de este opioide incautado por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos aumentó de apenas 1 kilogramo en 2013 a 200 en 2016.
Fentanilo desde China
El documento del organismo internacional también menciona que hay indicios de que se utiliza a México como punto de reexpedición de este opioide sintético proveniente de China.
La experta aclara que los gobiernos de México y Estados Unidos no saben la cantidad de fentanilo que se trafica por la fronteras.
“El gobierno de Estados Unidos dice que el fentanilo que se consume proviene de México en gran parte por su actitud intervencionista. Apenas se está analizando. Sin duda es la ruta más importante, pero no se conoce su dimensión”, comenta Gómez.
La especialista en seguridad añade que disminuyó paulatinamente la siembra de amapola en los dos últimos años por el aumento del consumo de fentanilo. Los productores de Guerrero y el norte del país cultivan esta planta para producir goma de opio y heroína.
En 2018, el precio de la goma de opio en México cayó en 80 por ciento debido al aumento del uso del fentanilo en Estados Unidos, de acuerdo con un estudio del Network of Researches of International Affairs (Noria, por sus sus siglas en inglés).
El precio por kilogramo de goma cayó de 20 mil pesos en 2017, a seis u ocho mil pesos en 2018. Y hace dos años, el monto de la producción de heroína alcanzó los 19 mil millones de pesos en México, pero en 2018 cayó a siete mil millones de pesos, según los registros de Noria.
El profesor explica que la venta de fentanilo es un mercado creciente que continuará aumentando si las autoridades de México y Estados Unidos no intervienen.
Tirado Cervantes añade que es necesaria una colaboración en términos de seguridad para atender el tráfico de drogas entre los dos países, no obstante, es complicado acordar una agenda en conjunto sobre las prioridades a atender porque los dos gobiernos tienen intereses distintos.
Mientras los gobiernos de los dos países no logren un acuerdo, el crimen organizado mexicano continuará con el tráfico de una pastilla que provoca la muerte.