Tirar monedas en una fuente para atraer la buena suerte es una superstición popular en algunos países, pero fue mala suerte para una tortuga marina en Tailandia, a la que le fueron extraídas 915 monedas.
Veterinarios en Bangkok operaron a la tortuga hembra apodada “Bank”, que había tragado las monedas que los turistas tiraron durante años a su fuente en el pueblo de Sri Racha, en el oriente de Tailandia.
Muchos tailandeses creen que tirar monedas les traerá longevidad. Generalmente, una tortuga marina verde vive unos 80 años, dijo Roongroje Thanawongnuwech, decano de la facultad de veterinaria de la Universidad Chulalongkorn. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza incluye a las tortugas marinas en su lista de especies en peligro de extinción.
Al final, las monedas formaron un bulto de cinco kilogramos (11 libras) en el estómago del reptil marino de 25 años. El peso rajó la concha abdominal del animal, causándole una infección que puso su vida en peligro.
Cinco cirujanos de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Chulalongkorn pacientemente le extrajeron las monedas en cuatro horas, mientras “Bank” dormía bajo anestesia total. Todo el bulto era demasiado para sacar por la incisión de 10 centímetros (cuatro pulgadas) que hicieron, así que tuvieron que extraer unas cuantas monedas a la vez. Muchas de ellas estaban corroídas o se habían disuelto parcialmente.
“El resultado es satisfactorio. Ahora depende de Bank, a ver qué tanto se puede recuperar”, dijo Pasakorn Briksawan, uno de los integrantes del equipo de cirugía. Mientras la tortuga se recupera en el hospital para animales en la Universidad de Chulalongkorn, estará bajo una dieta líquida por las siguientes dos semanas.
La líder del equipo de cirugía dijo que se puso furiosa cuando descubrió la causa de la agonía de la tortuga.
“Me enojó que la gente, ya sea que quisieron hacerlo o no, o si es que lo hicieron sin pensar, le habían causado daño a esta tortuga”, dijo Nantarika Chansue, directora del centro de investigación veterinaria médico para animales marinos de la Universidad de Chulalongkorn.
Con información de AP