Después de cinco meses de ganar la presidencia de Guatemala, el binomio de Bernardo Arévalo y Karin Herrera tomará posesión el próximo 14 de enero.
Arévalo y Herrera enfrentaron diversos obstáculos legales para llegar a este punto, como la ilegalidad de su partido Movimiento Semilla por presuntamente usar cinco mil firmas fraudulentas para calificar en la competencia electoral, y el despojo de la inmunidad del candidato electo.
La inmunidad del político se vio amenazada luego de que en noviembre del año pasado la Fiscalía lo ligó a los daños causados a la Universidad de San Carlos en 2022, cuando se registró una protesta estudiantil en rechazo a las elecciones de esa casa de estudios superiores.
Como el binomio así lo hizo con las acusaciones de su partido, desmintió también los señalamientos contra el candidato electo al asegurar que se trataban de declaraciones “inaceptables y espurias”.
El 14 de enero tomaremos posesión y comenzaremos la transformación de nuestro gran país. https://t.co/tbCITXEd7h
— Bernardo Arévalo (@BArevalodeLeon) January 11, 2024
La ultraderecha podría querer poner nuevos retos para bajar a Arévalo del poder
A pesar de los obstáculos superados hasta hoy por el binomio guatemalteco, el doctor Adalberto Santana, investigador de América Latina y el Caribe de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), opina que todavía podría haber sectores de la ultraderecha queriendo poner nuevos retos para bajarlo del poder.
El especialista argumenta que al ser los golpes de Estado en Guatemala casi una tradición, la estabilidad de Arévalo y Herrera no es algo garantizado.
Tan solo en el siglo XX, Guatemala vivió diversos golpes de Estado, entre los que destacan tres: en 1921, cuando Carlos Herrera Luna fue removido del poder por su intento de evitar regresar a la dictadura; en 1963, cuando el sistema de corrupción de Miguel Ydígoras Fuentes fue altamente criticado; y en 1983, cuando dos generales y un coronel evitaron que José Efraín Ríos siguiera con la presidencial.
En cuanto Arévalo y Herrera tomen posesión, el doctor Santana enfatiza que será cuestión de esperar a que “madure” la situación política en el país para garantizar que su transición sea respetada y pacífica, como así lo han solicitado algunos gobiernos y organizaciones.
Felicito al pueblo vecino y hermano de Guatemala por el triunfo de Bernardo Arévalo como presidente de la República. Estoy seguro de que llegarán nuevos tiempos de humanismo y justicia para todos y, en particular, para los herederos de la gran civilización mesoamericana.
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) August 21, 2023
¿Qué países y organizaciones respaldan el cambio de gobierno en Guatemala?
Respecto a los señalamientos políticos contra el binomio guatemalteco, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha sido uno de los jefes de Estado que más ha respaldado la transición pacífica.
En diciembre del año pasado, el tabasqueño declaró que “por una resistencia al cambio y de falta de respeto a la voluntad de los guatemaltecos”, en el país al sur de México se estaban poniendo muchos obstáculos contra Arévalo.
“Son nuestros hermanos y no queremos que haya inestabilidad política (…) Si no se respeta la voluntad popular en Guatemala, se pueden originar conflictos”, dijo López Obrador.
El mexicano incluso le pidió a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que se posicionara, lo cual ya había ocurrido con anterioridad. Antonio Guterres, secretario general del organismo internacional, manifestó su alarma por los acontecimientos en Guatemala y a inicios de diciembre pasado llamó a respetar la voluntad de los votantes y a una transferencia del poder sin contratiempos.
De acuerdo con el doctor Santana, la presencia del presidente López Obrador en la toma de posesión de Arévalo sería de gran importancia al ser México un país cercano a Guatemala desde la época prehispánica hasta nuestros días, además de que con ello se dejaría en claro el respaldo del pueblo mexicano al nuevo gobierno guatemalteco.
Es de Estados Unidos de donde también se prevé un apoyo hacia el país latinoamericano al ser la nación de América del Norte con más relevancia en el mundo, así como de la Organización de los Estados Americanos (OEA).