“Tenemos que detener la invasión a EU”, proclama Trump al cierre de la Convención Nacional Republicana

Donald Trump acepta la nominación de su partido con un discurso que rompió récord de duración y en donde las falsedades de migración se unieron a los recuentos del atentado
Pablo Abundiz Pablo Abundiz Publicado el
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En la noche final de la Convención Nacional Republicana, Donald Trump se convirtió oficialmente en el candidato del partido por tercera vez consecutiva. Al aceptar formalmente la nominación, el magnate dio un discurso en donde el intento contra su vida y la migración ocuparon el mayor tiempo al micrófono.

“Esta noche, con fe y devoción, acepto orgullosamente su nominación para la presidencia de los Estados Unidos”, exclamó Trump al inicio de un discurso que duró más de 90 minutos. Después de llamar a la unidad de todo el país, contar la historia del atentado contra su vida y prometer no retroceder, el exmandatario regresó a su usual retórica en donde negó los resultados de la elección del 2020 y acusó al Partido Demócrata de atacarlo por razones políticas.

“El Partido Demócrata debería de dejar de utilizar el sistema judicial para atacar y etiquetar a sus oponentes políticos como una amenaza para la democracia”, argumentó el candidato al recordar los casos judiciales en los que se ha visto envuelto en los últimos años.

Con peticiones de ser enviado de vuelta a la Casa Blanca, Trump abandonó el discurso conciliatorio que abrazó durante los últimos días y retomó los alegatos de una Nación en declive que solo él puede salvar.

“Tenemos que detener la invasión a nuestro país, que está matando a cientos de miles de personas por año”, pronunció Trump cuando volvió a hablar sobre su política migratoria. Citando falaces estadísticas sobre migración, el republicano apeló a las minorías estadounidenses al decir que los migrantes les quitan trabajos que podrían ser de ellos.

Con amenazas de cerrar la frontera y efectuar la mayor deportación de migrantes en la historia de Estados Unidos, Trump, regresó a los argumentos que lo pusieron en el mapa cuando anunció su primer esfuerzo presidencial en 2015.

En materia de política exterior, el candidato prometió terminar con las guerras de Ucrania e Israel y aseguró que de él haber estado en la Casa Blanca estos últimos cuatro años el mundo no estaría al borde de “la tercera guerra mundial”.

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