Singapur dejará de pagar atención médica a pacientes COVID que no se hayan vacunado

Cabe señalar que Singapur registra una tasa de vacunación contra COVID-19 del 86 por ciento de su población
Indigo Staff Indigo Staff Publicado el
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Debido a la oposición que hay en diversas partes del mundo a la vacunación contra el COVID-19 y los rebrotes que se han registrado sobre todo en Europa, este martes el gobierno de Singapur anunció nuevas medidas para frenar los contagios.

Las autoridades del país asiático señalaron que todas las personas que decidan no inmunizarse con la vacuna deberán pagar por su tratamiento en caso de requerirlo.

“Las personas no vacunadas constituyen una considerable mayoría de las que requieren atención hospitalaria intensiva, y contribuyen de manera desproporcionada a la carga de nuestros recursos sanitarios”, dijo el Ministerio de Salud en un comunicado.

“Por lo tanto, a partir del 8 de diciembre de 2021, comenzaremos a cobrar a los pacientes de COVID-19 que no estén vacunados por decisión propia. Esto se aplicará a todos los pacientes de COVID-19 no vacunados admitidos a partir del 8 de diciembre de 2021 en los hospitales y centros de tratamiento de COVID-19”, continuó.

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Actualmente, el gobierno de Singapur se encarga de las facturas médicas relacionadas con la enfermedad para los singapurenses, los residentes permanentes y los titulares de visados de larga duración, y seguirá haciéndolo con la nueva política.

Tras anunciarse las nuevas medidas, las autoridades aclararon que esto no cambiará para las personas vacunadas.

Singapur tiene una de las tasas más altas de cobertura de vacunas a nivel mundial, pues el 86 por ciento de la población está totalmente vacunada, mientras que otro 18 por ciento ha recibido una vacuna de refuerzo, según los últimos datos del gobierno.

Pese a que Singapur logró contener la pandemia con estrictas medidas sanitarias, desde septiembre enfrenta un repunte en los contagios de COVID-19.

Por la sobrecarga que enfrenta el sistema de salud, el gobierno anunció un cambio en sus políticas respecto al tratamiento del SARS-CoV-2.

Reino Unido, Francia y Estados Unidos también están planteando tomar nuevas medidas para las personas que deciden no vacunarse.

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