Alexánder Zajárchenko, líder de la autoproclamada república popular de Donetsk, murió este viernes en una explosión en una cafetería en el centro de la región separatista ucraniana, según informaron fuentes de seguridad de este región.
Agencias oficiales de los insurgentes separatistas aseguran que el atentado se produjo en un restaurante llamado Separ, situado en el bulevar Pushkin de la ciudad de Donetsk.
El establecimiento se encuentra junto a la residencia de Zajárchenko y muy cerca de la oficina de los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) que velan por el cumplimiento del alto el fuego.
Zajárchenko fue el jefe de la república popular de Donetsk después de su declaración de independencia de Ucrania en 11 de mayo de 2014. La separación se logró gracias al apoyo de las fuerzas rusas durante el conflicto ucraniano.
La información de su muerte fue confirmada por autoridades de la república separatista que calificaron lo ocurrido de “acto terrorista”. También anunciaron la detención de varias personas en relación con el ataque.
El gobierno ruso no tardó en reaccionar y acusó a Kiev del atentado.
“Hay fundamentos para pensar que detrás de ese asesinato está el régimen de Kiev que en más de una ocasión ha echado mano de métodos similares para deshacerse de los que discrepan”, dijo a periodistas la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova.
POSIBLES RAZONES
De acuerdo con analistas ucranianos y rusos, Zajárchenko se había convertido en un obstáculo para cumplir los Acuerdos de Minsk, protocolos firmados por segunda ocasión en febrero de 2015 con el objetivo de poner fin a la guerra en las dos regiones separatistas del este de Ucrania, Donetsk y Lugansk.
En este sentido, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso acusó al gobierno ucraniano de implementar actos terroristas que agravan aún más la situación en la región en lugar de cumplir los Acuerdos de Minsk y buscar vías para resolver el conflicto interno.
En la misma línea, el presidente del parlamento rebelde de Donetsk, Denis Pushilin dijo “se trata de una nueva agresión por parte de Ucrania”.
Donetsk y Lugansk, regiones el este de Ucrania, viven desde hace cuatro años un conflicto armado que enfrenta a las tropas del gobierno ucraniano y a los separatistas prorrusos. A pesar de los acuerdos de paz firmados en 2015 en la capital bielorrusa, la guerra continúa.
