Trump comenzó un perfil bajo, dijo sentirse avergonzado y pidió perdón por los comentarios que se dieron a conocer en los que se expresaba de manera vulgar de las mujeres, lo cuales le han costado perder el apoyo de más de 150 líderes republicanos.
El candidato presidencial republicano, Donald Trump, logró resistir la presión de la demócrata Hillary Clinton durante el segundo debate, aunque no se impuso en la discusión, el republicano evitó caer otro escaño y logró mantenerse con aspiraciones para el tercer y último careo.
Trump comenzó un perfil bajo, dijo sentirse avergonzado y pidió perdón por los comentarios que se dieron a conocer en los que se expresaba de manera vulgar de las mujeres, lo cuales le han costado perder el apoyo de más de 150 líderes republicanos.
El republicano dijo que mientras lo suyo eran sólo palabras, Bill Clinton sí estuvo inmiscuido en diversos escándalos sexuales y señaló que la ex primera dama atacó a las mujeres relacionadas con su esposo.
Clinton dijo que los comentarios de Trump mostraron el verdadero rostro del magnate, lo cual lo descalifica para ser presidente de los Estados Unidos e invitó a la gente a sacar sus propias conclusiones de un hombre que ha insultado a mujeres, latinos, musulmanes y afroamericanos.
Trump dijo que de llegar a ser presidente, instruirá a un fiscal especial para investigar el caso de los correo de Clinton. Mientras que la candidata recalcó que se equivocó en el tema de los correos y señaló que un hombre tan impulsivo como Trump no debería estar en el gobierno.
En cuanto al tema de los inmigrantes, Trump dijo que en el país hay muchos delincuentes extranjeros, los cuales son tan peligrosos que ni en su propio país lo quieren de vuelta. El republicano dijo que hay que fortalecer la frontera con México para frenan e crimen.
El magnate señaló que en el caso de los musulmanes deben ser ellos quienes adviertan a las autoridades cuando detecten amenazas contra la seguridad nacional.
Por su parte, Clinton dijo que Estados Unidos siempre ha tenido musulmanes exitosos, por lo que no se debe limitar el acceso al país por la religión de una persona, aunque precisó que nunca dejaría entrar a alguien que considere un peligro.
Clinton dijo que los refugiados son productos de regímenes como el de Siria y Rusia e indicó que Trump admira a Vladimir Putin. El republicano dijo que no conoce nada de Rusia y que la demócrata sólo usaba lo de Rusia para desviar el fracaso de la política exterior.
Sobre los impuestos, Trump dijo que sí se ha beneficiado de las reglas fiscales, pues ha tenido muchas depreciaciones y señaló que los amigos y donadores de Clinton se han beneficiado de los mismas reglas.
El republicano dijo que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que firmó Bill Clinton es el peor que ha tenido Estados Unidos y dijo que ella ha mentido, pues pretende firmar acuerdos similares en la presidencia, los cuales dijo han trasladado los empleos a otros países.
Clinton dijo que el discurso del republicano ha provocado el efecto Trump en las escuelas, es decir, que se comience a discriminar a niños de las minorías. La candidata señaló que la campaña de odio y violencia da un mal ejemplo a los niños del país.
Clinton señaló que de ser presidente elegiría a un juez para la Suprema Corte que respete los derechos de la mujer a decidir sobre su cuerpo e impulse la equidad de género, al tiempo que criticó a los republicanos por haber bloqueado la votación en el Senado.
Trump dijo él elegiría a juez respetable como el fallecido Antonin Scalia, el cual se caracterizó por estar contra el aborto y de cualquier restricción al uso de armas de fuego.
Al preguntárseles qué es lo que admiran de su oponente, Clinton dijo que él admira y respeta a los hijos de Trump, los cuales dijo son increíblemente habilidosos y devotos. La candidata aclaró no estar de acuerdo con él, pero admira la formación de sus hijos.
Trump dijo que él admira de Clinton su persistencia, pues nunca se rinde. El republicano dijo que no está de acuerdo por lo que la ex secretaria de Estado pelea, pero admira su manera de seguir adelante.
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El formato de este segundo debate fue diferente al anterior, ya que la mitad de las preguntas fueron realizadas por la audiencia y la otra parte por los moderadores. El debate se llevó a cabo en la Washington University en St.Louis, Missouri.
Los moderadores del debate fueron Anderson Cooper, presentador de CNN, este año moderó uno de los debates en las primarias demócratas, Martha Raddatz, corresponsal jefe de Internacional de ABC y en 2012 moderó el debate de vicepresidentes.
