"Es probable que se apruebe alguna ley para aforar al que sería ya ciudadano Juan Carlos de Borbón. Lo quieren mantener más protegido de lo que estaría un ciudadano cualquiera"
El rey Juan Carlos abdicó el trono de España, pero hay algunos lujos a los que no renunciará.
Juan Carlos acabó ayer con 39 años de reinado al firmar la ley de su abdicación en una ceremonia oficial con 150 funcionarios en el Salón de Columnas del Palacio Real, en Madrid.
Pero los cuestionamientos continúan para el monarca, pues seguirá como capitán del Ejército, tendrá protección judicial y podría recibir una pensión.
Esto a pesar de que su hijo, Felipe de Asturias, sería proclamado hoy en una ceremonia austera que busca calmar las voces opositoras que piden un referendo que instaure la república y acabe con la monarquía.
Privilegios reales
Aunque pasarán a un segundo plano, Juan Carlos y su esposa Sofía seguirán dentro de la Familia Real, tendrán el título de reyes de forma vitalicia y aún recibirán el tratamiento de “Majestad”, informó ayer el medio español 20 Minutos.
“Fuentes de la Casa del Rey confirmaron que los padres de Felipe VI seguirán viviendo en el Palacio de la Zarzuela, aunque el nuevo rey ocupará el que fue el despacho de su padre. El nuevo monarca fijará las tareas que desempeñarán sus padres”, añadió.
Además, el ministro de Defensa de España, Pedro Morenés, informó a El País que Juan Carlos no se jubilará del Ejército, pues será capitán general en la reserva, por lo que conservará el uniforme, participará en actos castrenses y tendrá el trato que corresponde al empleo.
“Según la ley del personal militar vigente, el rey debería pasar directamente a retiro, equivalente a la jubilación. Pero el Gobierno optó por aplicarle la ley de 1989, que estaba en vigor cuando don Juan Carlos hubiera debido jubilarse”, publicó el diario.
“Esa ley preveía que los generales no pasaran a retiro al cumplir los 65 años, sino a ‘segunda reserva’”.
El monarca perderá su inviolabilidad, un privilegio constitucional que impide juzgar al rey en un tribunal por cualquier razón.
Aun así, a Juan Carlos no lo podrán condenar por delitos cometidos durante su reinado y el Partido Popular (PP) alista una propuesta de ley para permitir que reciba un fuero, lo que significa que solo podría recibir un juicio del Tribunal Supremo.
“No exime de responsabilidad sino que establece un procedimiento para evitar que personas que han ocupado cargos muy relevantes, como el rey, no se vean con la necesidad de acudir a los tribunales”, explicó la jurista Yolanda Gómez a BBC Mundo.
¿Chequera abierta?
Otra incógnita por resolver es la pensión que Juan Carlos podría recibir una vez que Felipe de Asturias emprenda su reinado.
El monarca percibía un sueldo anual de más de 292 mil euros, unos 400 mil dólares, que provenían de los Presupuestos Generales del Estado.
“Pero no existe una norma que regule la dotación de los reyes salientes ni la distribución de las cuentas de la Casa Real que, en 2014 por primera vez, contemplan un sueldo fijo para la reina y para la princesa Letizia”, informó el diario La Tercera.
La Casa Real tiene un presupuesto anual de alrededor de 7.8 millones de euros anuales, cantidad que peramenecería sin cambios, por lo que se prevé que Felipe VI le asigne a su padre el sueldo que él percibía como príncipe de Asturias, más de 146 mil euros anuales.
Felipe VI: rey sin corona
El nuevo rey de España es proclamado, pero no recibe ninguna corona.
A diferencia de otras monarquías europeas, la ceremonia de Felipe VI sería una celebración sencilla, marcada por la austeridad.
En el evento oficial, Felipe vestiría el uniforme de gala del Ejército de la Tierra en el Congreso de los Diputados, a donde no asistiría ningún mandatario extranjero o monarca europeo.
Esto ocurre porque así lo contempla la Constitución.
“La coronación, frente a la proclamación, estaba impregnada de referencias simbólicas con claras reminiscencias religiosas”, dijo a BBC Mundo el politólogo Juan Carlos Cuevas Lanchares, de la Universidad Complutense.
Otra razón es que el cetro y la corona, que estarán en exhibición, son muy grandes, y representan un mero símbolo de la institución desde su fabricación, en 1775.
“El tamaño de la corona, ‘muchísimo mayor de lo normal’, se debe precisamente a su ‘carácter ceremonial’, no para que el rey sea coronado sino para exhibir dicho símbolo en su proclamación”, reportó EFE.
Además, la austeridad se debe a las voces opositoras.
Políticos de izquierda, republicanos y de comunidades separatistas, como el País Vasco y Cataluña, confirmaron que no asistirían.
Datos de la ceremonia
> Más de 7 mil elementos de seguridad resguardarían la ceremonia.
> Juan Carlos no asistiría para no ‘quitarle el protagonismo a su hijo’.
> Sería en el Congreso de los Diputados, a las 10:30 horas, tiempo de España.
> Felipe VI y Letizia harían un recorrido en Madrid.
> No habría presencia de mandatarios extranjeros.
> Participaría toda la familia del rey y la Familia Real, excepto por la infanta Cristina.
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