El restaurante alemán Oma’s Küche, situado en la isla turística de Rugen, prohibió la entrada a los niños menores de 14 años a sus instalaciones por molestos, así lo aseguró el dueño del lugar, Rudolf Markl.
El hombre admitió que su decisión de vetar a los menores es la búsqueda de un “oasis de paz” para sus demás clientes. Declaró que esta medida no está totalmente dirigida a los niños, sino a sus padres, quienes, dijo, no cuida de ellos.
“Los padres no pueden controlar a sus hijos, ven cómo molestan a otros comensales, gritan y dañan parte del inventario. Ellos (los padres) sólo sonríen y siguen comiendo”, dijo Markl.
En la página oficial del restaurante, además de asegurar que todos su chefs tienen una buena educación y una experiencia laboral apropiada, resalta un pequeño aviso en el que se lee “Restaurante sólo para adultos”.
La medida ordenada por Markl sólo admite a los niños antes de las 17:00 horas.
Por su parte, la Ofician de Lucha contra la Discriminación de Alemania, anunció que la decisión plantea preocupaciones legales, ya que podría chocar con la prohibición del país sobre la discriminación por la edad.
“El argumento del ruido que molestaría a los invitados no es suficiente para prohibir a niños menores de cierta edad entrar a un local”, dijo Bernhard Franje, luego de asegurar que la empresas corren el riesgo de ser demandada por algunos de sus clientes.
Sin embargo, esta no es la primera vez que dicho hotel alemán ha causado polémica, ya que en 2007 Rudolf prohibió que sus comensales fumaran dentro de las instalaciones, una medida que convirtió a su restaurante como el primero en Alemania en prohibir el tabaco.
