Barrios enteros quedaron devastados. Miles se quedaron sin luz, otros perdieron sus hogares. Una inusual ola de tornados otoñales y tormentas eléctricas azotó este domingo el centro-norte de Estados Unidos, dejando al menos ocho muertos.
Los fuertes vientos se sintieron en 12 entidades: Michigan, Wisconsin, Iowa, Illinois, Missouri, Indiana, Ohio, Kentucky, Tennessee, Virginia Occidental, Pensilvania y el oeste de Nueva York.
El estado de Illinois se llevó la peor parte de la furia. Seis personas fallecieron, decenas resultaron heridas, hubo vuelos cancelados e incluso las autoridades del estadio Soldier Field de Chicago ordenaron evacuar y retrasaron un juego de futbol americano.
Los tornados también demolieron comunicades enteras, volcaron automóviles y arrancaron árboles en otros poblados del país.
Hasta ayer, el gobernador de Illinois Pat Quinn había declarado a siete condados zonas de desastre. Además las comunicaciones seguían siendo difíciles y con tantas carreteras intransitables, no quedó claro si los heridos y muertos aumentarán en los próximos días. (Fuente: AP)
