La exaspirante a la presidencia de Perú es libre. Tras haber sido acusada de recibir 1.2 millones de dólares para su campaña presidencial en 2011, un tribunal de apelaciones sentenció que el señalamiento no tuvo los fundamentos necesarios.
“La razón que lleva a este colegiado a declarar la nulidad de la resolución apelada tiene que ver con la ausencia de motivación. Por lo tanto, la nulidad se irradia también en aquellos cuya detención preliminar judicial está dispuesta en la resolución apelada”, explicó Octavio Sahuana, presidente de la Sala de Apelación.
Con ello, se anuló la orden de detención contra otros involucrados, entre ellos los exministros Jaime Yoshiyama, quien se encuentra en Estados Unidos, y Augusto Bedoya, detenido el pasado 10 de octubre en la Plaza Popular de Perú. Fueron esposados con el argumento de presunto lavado de dinero y por supuestamente haber formado parte de una investigación criminal
El magistrado de la Corte de Apelaciones determinó que el juez Richard Concepción Carhuancho, del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria, no fundamentó adecuadamente su decisión con base en el requerimiento del fiscal José Domingo Pérez, quien solicitó la detención preliminar como parte de la investigación contra Fujimori Higuchi, por presuntamente haber recibido aportes de Odebrecht para su campaña presidencial hace siete años, cuando su partido era Fuerza 2011, y en el que ella fungía como presidenta y fundadora.
Tras darse a conocer la liberación de la exaspirante, fue la misma Keiko la que apareció en la calles para ir a visitar a su padre, el expresidente Alberto Fujimori, condenado a 25 años de cárcel el 7 de abril de 2009 por su responsabilidad de secuestro agravado y lesiones graves tras ser hallado culpable intelectual de las matanzas de Barrios Altos, en 1991.
Keiko declaró que este jueves fue un día completamente familiar, por lo que también le pidió a sus hijas que la acompañaran para visitar a su abuelo, y estar juntas tras los días en los que no lo estuvieron.
