Tras una semana de protestas en contra del gobierno de Nicolás Maduro y el Tribunal Supremo de Justicia, las autoridades venezolanas han confirmado, hasta el momento, la muerte de dos jóvenes que se encontraban en el lugar de las protestas.
Daniel Queliz, un estudiante de 20 años de edad, es la segunda víctima mortal de esta semana de protestas, el joven recibió un balazo la noche del lunes en medio de una manifestación en la ciudad de Valencia en el centro del país.
La muerte de Queliz ocurrió después que la fuerza pública acudió este lunes a dispersar una protesta en una zona residencial de Valencia, el Ministerio Público de Venezuela señaló que el caso ya es investigado por dos fiscales.
El pasado jueves se registró la primera víctima mortal durante las protestas, se trató del joven Johan Ortiz, quien murió a causa de un tiro en una protesta en la región norteña de Miranda, sobre cual fue acusado un agente de la Policía Nacional.
La Asamblea Nacional, controlada por la oposición, ha señalado que además de las dos personas muertas, también se han registrado cientos de heridos y detenidos, además ha hecho un llamado a las fuerzas militares para que cese la represión contra los manifestantes.
“La Guardia Nacional debe dejar de reprimir al pueblo que sólo está pidiendo respeto a la Constitución, el respeto a las competencias de la Asamblea Nacional y la realización de Elecciones”, señaló este lunes el líder de la Asamblea, Julio Borges.
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Esta serie de protestas se presentó luego que el Tribunal Supremo de Venezuela, presuntamente bajo el control de Maduro, resolvió que asumiría las atribuciones de la Asamblea, por considerarla en desacato, sin embargo, tras la presión internacional se dio marcha a atrás a la resolución.
Durante la protestas de este lunes se registraron 200 heridos en todo el país, que se sumaron otros 100 que se produjeron en tres manifestaciones desde la semana pasadas. La manifestación estuvo encabezada por varios diputados, que también fueron contenidos por la policía.
Organizaciones defensoras de derechos humanos dijeron que en una semana de protestas fueron detenidas 281 personas. Todas las manifestaciones fueron reprimidas con gases lacrimógenos y disparos de perdigones, impidiendo las movilizaciones hacia la Defensoría del Pueblo.