Portugal va a elecciones anticipadas en 2024 tras renuncia de António Costa

El presidente Marcelo Rebelo de Sousa llamó a votaciones generales luego de darse a conocer las investigaciones contra el primer ministro por presunta corrupción
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
Comparte esta nota

António Costa, exprimer ministro de Portugal, está a la espera de que la investigación en su contra por presunta corrupción siga su curso para intentar rescatar su imagen.

El político de 62 años fue señalado de corrupción y tráfico de influencias por presuntamente hacer tratos en favor de empresas portuguesas para extraer litio, un mineral que será utilizado para la energía del futuro.

Hay otros señalamientos contra Costa que aseguran que intervino para acelerar contratos con la empresa Start Campus para producir hidrógeno verde y construir un centro de datos en Sines, un puerto al sur de Lisboa.

El nombre del exministro fue pronunciado por algunos de los sospechosos al asegurar que el político era parte de las actividades ilícitas, a lo que Costa respondió diciendo que tenía la conciencia limpia y que confiaba en las investigaciones del Sistema de Justicia de su país.

“Yo no estoy por encima de la ley. Si hay alguna sospecha, que sea investigada. Mi obligación es preservar la dignidad de las instituciones democráticas”, declaró Costa en televisión nacional luego de dimitir de su cargo.

Aunque el exministro ya entregó su carta de renuncia al presidente Marcelo Rebelo de Sousa, seguirá fungiendo como mandatario hasta las próximas elecciones generales.

Para la doctora Marta Ochman, especialista en política europea e investigadora del Tecnológico de Monterrey, el escenario que más predominaba en Portugal era el de elecciones anticipadas, como así lo anunció ayer el jefe de Estado. De no hacerlo, explica la especialista, el gobierno de minoría que lideraba Costa iba a dejar pasar políticas importantes para el pueblo portugués.

“Estas nuevas elecciones abren un panorama de mucha incertidumbre porque ni la izquierda, ni el centro, ni la derecha, tienen una imagen clara entre los votantes, además de que no tienen un liderazgo suficientemente claro como para que les sea fácil tener un gobierno de mayoría”, señala.

El gobierno de Costa era rescatable porque el exministro contaba con una alta popularidad, principalmente tras las últimas elecciones de 2022 en las que fue reelegido con una mayoría absoluta.

Antes del caso de Costa, el último primer ministro de Portugal que fue acusado de corrupción fue José Sócrates, mandatario entre 2005 y 2011, por supuestamente haber recibido 34 millones de euros en comisiones y sobornos de diferentes empresas y entidades bancarias a cambio de contratos públicos.

La investigación contra Sócrates siguió hasta 2021, cuando se concluyó que no sería juzgado por corrupción, pero sí por delitos de falsedad documental y blanqueo de capitales.

Hasta la fecha, el exministro asegura que todos los señalamientos en su contra son falsos porque no hay pruebas de las fortunas escondidas.

Antonio Costa podría regresar a la política de Portugal hasta en cinco años si resulta inocente en las investigaciones en su contra

A pesar de las acusaciones que hay contra Costa, su renuncia fue “autónoma y sin presiones”, de acuerdo con Ochman.

De acuerdo con la europeísta, si con las investigaciones se llega a la conclusión de que Costa no está relacionado con las empresas de hidrocarburo verde o el litio, sino que fueron personas cercanas a él, su imagen no se vería tan afectada.

“Ante ese panorama, Costa todavía podría surgir en la política nacional en un futuro, pero no en los siguientes comicios, sino en cuatro o cinco años”, dice la doctora.

Mientras que Costa se queda a la espera de los resultados de las investigaciones, Ochman asegura que el socialista podría retomar su vida como comentarista o académico sin que se le vea involucrado con su partido para no perjudicarlo de cara a las votaciones.

“Después de este caso, creo que el partido oficialista debería tener un liderazgo renovado, a alguien más joven para poder ganar otra vez las elecciones”, dice.

La siguiente jornada electoral se llevará a cabo el 10 de marzo de 2024, así lo precisó el gobierno de De Sousa, quien el pasado miércoles se citó con todos los líderes de los partidos que defendían el fin de la legislatura y la convocatoria de nuevos comicios.

El presidente dejó en claro que optó por votaciones anticipadas por decisión propia al considerar que el gobierno socialista que se quedaría en el poder hasta 2026 sería muy débil.

De Sousa aprovechó su presencia ante la opinión pública para agradecerle a Costa su labor frente al gobierno, al cual representó en momentos como la pandemia por COVID-19 y la crisis económica que provocó, así como la guerra en Ucrania y Medio Oriente.

“Espero que el tiempo, más pronto que tarde, permita esclarecer lo ocurrido en el respeto de la presunción de inocencia, la salvaguarda del buen nombre y el refuerzo del Estado de derecho democrático”, concluyó.

El presidente se presentó ante la prensa después de mantener una reunión con miembros del Consejo de Estado sobre la situación política del país, guiándolo a disolver el Parlamento.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil