Por reingreso a la UNESCO Estados Unidos pagará por los 5 años que abandonó la organización

Con la reincoporación de la Unión Americana a la organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura, especialistas aseguran que el gobierno del presidente Joe Biden tomó la mejor decisión para no alejarse de temas de interés mundial
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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Una vez que Estados Unidos fue aceptado de vuelta a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), tendrá que atender los deberes que le corresponden.

Si se toma en cuenta que la Unión Americana no fue miembro de la organización por los últimos cinco años, al reintegrarse deberá cumplir con su respectiva financiación y sumar a eso el pago de sus atrasos.

Es decir, Estados Unidos emitirá una financiación del 22 por ciento y lo que le corresponde de la última media década.  

Según detalló la organización, el Estado norteamericano también deberá de brindar aportes voluntarios para financiar programas entre los que se encuentran el apoyo al acceso a la educación en África, la memoria del Holocausto y la protección de periodistas.

Joe Biden tomó “decisión acertada” por regresar a EU a la UNESCO

“Si Estados Unidos quiere seguir siendo un líder de carácter mundial, no puede separarse de este tipo de organismos, sino fomentar su importancia, sobre todo porque tradicionalmente ha estado en favor de mantener su influencia a nivel mundial”, opina el internacionalista por la UNAM Óscar Abad Corral.

Bajo ese panorama, el también docente de la Universidad Anáhuac agrega que regresar a la UNESCO fue una “decisión acertada” por parte de la administración del presidente Joe Biden al tratarse de un mecanismo “importantísimo” para el momento de desarrollo en el que nos encontramos como humanidad.

“Por ejemplo, temas como la Inteligencia Artificial es de lo más sonado y lo que se está imponiendo. Estados Unidos estaría quedándose fuera de esto (…) Además, con su retiro había dejado que otras potencias mundiales, como China, siguieran creciendo y lo que más nos conviene a nosotros es que haya más competencia”, agrega Abad Corral.

Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, agradeció a los miembros de la UNESCO que hayan aceptado de vuelta a su nación. Agregó que desde la postura del presidente Biden su país era más fuerte y próspero cuando se relacionaba con el mundo.

Audrey Azoulay, directora general de la organización, detalló que fue más del 90 por ciento de los países los que aceptaron el regreso de la Unión Americana tras participar en una Conferencia General Extraordinaria.

Entre los Estados que no aprobaron el reingreso del país norteamericano fueron Rusia, Corea del Norte, Nicaragua y China, miembros del organismo desde 1954, 1974, 1952 y 1946, respectivamente

Fue desde 2021 que la entonces administración entrante del presidente Joe Biden solicitó volver a ser miembro de la UNESCO, luego de que en 2017 su antecesor Donald Trump deslindara a su nación del organismo. Un año más tarde se hizo efectivo su retiro.

El líder republicano argumentó que la organización estaba realizando actos en contra de Israel, como deslindar al judaísmo del Monte del Templo. Además, aseguró que su nación brindaba más financiación que el resto de los Estados miembros.

Donald Trump falló en su estrategia de alejarse del organismo

Con el retiro de Estados Unidos de la UNESCO, por ende, el organismo dejó de recibir el monto que le daba este país como miembro.

Ante esa situación, el expresidente Trump consideró que la organización se vería debilitada, impidiéndole cumplir todos sus compromisos, lo que no terminó siendo así.

“Lo que tal vez pensó la administración de Donald Trump es que al ser Estados Unidos uno de los países que más financiaba a la UNESCO, podía debilitarla y eso no ha ocurrido. Eso quiere decir que fue errónea su estrategia.

La primera vez que la Unión Americana dejó a la organización fue en 1974 y la segunda en 1984

“Estos cinco años ya debieron darle a los republicanos la lección para entender que alejarse no fue la mejor decisión y que no es conveniente deslindarse de los temas que se manejan en la organización”, señala el también egresado del Instituto de Estudios Políticos Sciences-Po en Francia.

En esa medida, si la oposición regresa a la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre del siguiente año, es poco probable que vuelva a tomar la decisión que en su momento impulsó Trump de separar a Estados Unidos de la organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

Antes de que el gobierno del expresidente retirara a Estados Unidos como miembro de la UNESCO, administraciones anteriores ya habían hecho lo mismo.

La primera vez que la Unión Americana dejó la organización fue en 1974. En ese entonces, la nación vecina abandonó sus contribuciones financieras de manera temporal en represalia a que el organismo reconoció a la Organización para la Liberación de Palestina.

Bajo el gobierno de Ronald Reagan, en 1984, el país norteamericano volvió a dejar la organización por segunda ocasión. Esta vez el distanciamiento duró 19 años.

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