La segunda cumbre entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, concluyó sin “ningún acuerdo”.
Sentí que no es bueno estar firmando nada hoy. Dejaré que el Secretario de Estado Mike Pompeo hable sobre eso, dijo Trump.
Tanto Jong-un como Trump salieron del Hotel Metropole, donde se reunieron, lo que significó que la ceremonia de firma de un acuerdo no se celebró como estaba previsto.
Si no tuviera voluntad de hacerlo, no estaría aquí ahora. Eso es lo que estamos tratando ahora mismo, aseguró Kim al ser cuestionado sobre si hay voluntad para la desnuclearización.
Pese a la buena sintonía expresada por los dos mandatarios en las últimas 24 horas, la firma de un posible acuerdo ha quedado en suspenso, poco después de una comparecencia en la que el líder norcoreano aseguró que no habría ido a la capital vietnamita si no quisiera implementar la desnuclearización de la península coreana.
La comunidad internacional lamentó el fracaso de la segunda cumbre en Hanoi, la capital de Vietnam, que terminó intempestivamente y sin ningún acuerdo.
El Gobierno de Corea del Sur lamentó que no se alcanzó algún acuerdo, pero se dijo optimista ante el progreso “significativo” en sus negociaciones.
Por su parte China espera que el diálogo entre Pyongyang y Washington continúe después de que las dos partes no lograron un acuerdo en su cumbre en Vietnam.
La situación en la Península coreana experimentó un cambio de rumbo significativo durante el último año y tendrá una victoria con esfuerzo que merecerá ser celebrada, aseguró el portavoz del ministro de Exteriores chino, Lu Kang.
Rusia calificó de “positivo” el hecho de que el proceso negociador no se suspendió, tras las declaraciones de Washington.
Entendemos, de momento, que las negociaciones no se han suspendido y eso, por supuesto, es positivo, explicó a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
