Pedro Sánchez se alista para ser investido como presidente de España por cuatro años más

El presidente de España, Pedro Sánchez, tiene una oportunidad más para permanecer en el gobierno por otros cuatro años.

Tras el fracaso del derechista Alberto Núñez Feijóo en su intento de investidura, y con la autorización del rey Felipe VI, a Sánchez le quedan un par de semanas para convencer al Congreso de su permanencia en La Moncloa.

Ante la Cámara Baja, el presidente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) expondrá el programa político que pretende implementar como jefe de Estado y solicitará la confianza de los legisladores para llevarlo a cabo.

Sánchez tendrá dos votaciones en el Congreso para avalar su investidura. De lograr la mayoría de votos a su favor, la presidenta de la Cámara, Francina Armengol, se lo hará saber al monarca de manera inmediata.

Si el presidente no logra ganar la confianza de los miembros del Congreso, España irá de nuevo a votaciones nacionales.

Al respecto, la doctora Martha Ochman, especialista en política europea e investigadora del Tecnológico de Monterrey, dice en entrevista que, aunque puede suceder, es poco probable que España se vaya a elecciones porque no sería del agrado de los electores.

“En los últimos años el sistema político de España ha sido muy inestable con las elecciones relativamente seguidas y eso en general no le gusta a los electores. Sánchez tiene hasta finales de noviembre para ser investido y, en caso de no lograrlo, en enero se tendrían que repetir las votaciones”, dice.

Desde su perspectiva, el mandatario tiene probabilidades muy altas de ser investido, pues a diferencia de Núñez Feijóo y de su Partido Popular (PP), ni él ni su grupo político tienen un rechazo tan contundente.

Para permanecer en el poder, la internacionalista del Tecnológico de Monterrey remarca que Sánchez tampoco necesitará el apoyo de todos los partidos independentistas para formar gobierno, siempre y cuando ejecute su propuesta de amnistía, una medida que los partidos Junts y Esquerra Republicana Catalunya (ERC) le pusieron como condición principal para apoyar su investidura.

“Sánchez debe tener mucho cuidado porque también es percibido como un político arrogante, aunque hasta ahora se ha mantenido con una actitud conciliadora”, comparte Ochman.

Los retos de Sánchez podrían bajar de dificultad en los próximos cuatro años

Si para noviembre Pedro Sánchez logra la aceptación del Congreso para permanecer en el gobierno como presidente, el socialista no tendrá ningún reto que dificulte su nuevo mandato, de acuerdo con la especialista en política europea.

En entrevista, la internacionalista remarca que además de los desafíos que implica la presidencia de la Unión Europea, más los retos comunes de una gubernatura federal, el jefe de Estado no afrontará situaciones como las de los últimos años.

Después de que Sánchez comenzó su mandato en 2018, un año después tuvo que emitir políticas que no derrumbaran a su país social y económicamente con la llegada de la pandemia de COVID-19.

Además, incluso a la fecha debe afrontar las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania, lo que ha llevado a que los costos del gas y el petróleo vayan en aumento, principalmente en Europa.

Respecto al apoyo al gobierno ucraniano, se prevé que Sánchez siga respaldándolo como hasta ahora, lo cual hubiera cambiado con Núñez Feijóo a la cabeza del país.

De acuerdo con datos del Instituto para la Economía Mundial, en lo que va de 2023 España está colocado en el lugar 16 de los países que más compromisos han hecho en favor de Ucrania. En cuanto a las promesas humanitarias, el Estado europeo se ubicó en el puesto 25 y en las financieras en el 13.

 ¿En qué consistirá el plan de gobierno de Pedro Sánchez?

Además de respaldar al gobierno del presidente Volodimir Zelensky, Sánchez aseguró que seguirá representando un proyecto ya conocido en los últimos cuatro años junto a Sumar, el grupo político de Yolanda Díaz con el que formará coalición.

El plan del socialista consistirá esencialmente en impulsar a todas las clases sociales, empleos estables, salarios y vivienda dignos, pensiones seguras para los jubilados presentes y futuros, la formación de los jóvenes y política verde en favor de la lucha contra el cambio climático.

“Me dispongo a trabajar para formar, lo antes posible, un gobierno de coalición progresista para garantizar la estabilidad que necesita el país para continuar impulsando políticas de convivencia en el marco de la Constitución de España.

“Dicho de otra manera: Nos disponemos a hacer lo que hemos hecho durante los últimos cuatro años. Si acaso, mejorando nuestra eficacia (…) Esperamos también hacerlo con menos emergencias inesperadas que en la pasada legislatura”, dijo Sánchez en la conferencia de prensa después de recibir el respaldo del rey.