El juicio de la matanza de Srebrenica se ha vuelto un proceso lleno de errores y alegatos absurdos.
Y es que el presunto culpable de las atrocidades en Bosnia pretende lavarse las manos con la excusa de presenciar una unión matrimonial.
La defensa de Ratko Mladic niega que el acusado haya estado implicado en la matanza por haber sido invitado a una boda los días que el ejército serbobosnio efectuó el genocidio.
Uno de los fiscales del juicio en los tribunales de La Haya, Dermont Groome, reconoce que Mladic abandonó Srebrenica, donde sucedió la masacre.
Indigo Staff