Los “momentos Obama” están de regreso. En un par de ocasiones, el actual presidente de Estados Unidos pudo provocar la risa del selecto público indeciso que se dio cita en el segundo debate presidencial en la Universidad Hofstra, en Long Island, Nueva York.
Fueron poco más de 90 minutos de intenso intercambio de directas e indirectas entre Barack Obama y Mitt Romney. Pero la tensión se rompió cuando el rostro y el tono de voz de aquel candidato vigoroso de 2008 se asomó en el ahora presidente a contracorriente en el que se ha convertido en 2012.
Juan Antonio Zertuche