Tras la persecución que culminó en un intercambio de balas el Capitolio el 3 de octubre, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, consideró que es urgente proponer una acción legislativa.
Esto ocurrió después de que Barack Obama intentara poner en práctica una solución al problema de las armas y fracasara. Es por esto que parece no querer arriesgarse, ya que asume no tendrá la posibilidad de obtener una mayoría en el Congreso para modificar la ley.
Puede ser que tras el shutdown del Gobierno, las acusaciones de espionaje por parte de Francia y México, y los problemas técnicos del sistema de registro de Obamacare, el presidente estadounidense no quiera tocar el tema de las armas.
En su cuenta de Twitter, el mandatario habla de la urgente necesidad de concretar la reforma migratoria, pero no hace comentario alguno sobre el último evento que involucró la muerte de un maestro en Nevada.
Sumando incidentes
Poco antes del inicio de la jornada escolar del pasado lunes, un alumno de la escuela intermedia Sparks, en el norte de Nevada, abrió fuego con un arma que encontró en su casa. Hirió a dos estudiantes de 12 años y mató a un maestro de matemáticas.
La policía informó que la agresión comenzó antes de que sonara la campana de inicio de clases, cuando los estudiantes bajan de los autobuses y se dirigen a sus salones. El adolescente de 12 años comenzó a disparar fuera de la escuela e hirió a un compañero en el hombro. Luego se dirigió a una cancha de baloncesto, donde encontró al profesor Michael Landsberry.
El maestro caminó despacio hacia el agresor y levantó las manos mientras le pedía que entregara su arma.
Las autoridades creen que el joven trató en algún momento de ingresar a la escuela, pero no pudo abrir la puerta.
Después de matar a Landsberry, el joven agresor le disparó a un segundo estudiante y lo hirió en el abdomen. Luego se dio un tiro en la cabeza.
“Hoy tenemos muchos héroes, incluyendo nuestros niños (…) y nuestro héroe caído, un maestro increíble”, dijo el superintendente del Distrito Escolar del Condado Washoe, Pedro Martínez.
La publicación Mother Jones señaló que desde que Obama asumió la Presidencia, suceden hechos violentos de este tipo cada tres meses. El Capitolio, la base militar y la masacre en Connecticut que acabó con la vida de 20 niños y seis adultos, son los últimos escenarios que han involucrado armas y que no han alarmado lo suficiente al Gobierno para controlarlas.
