La Organización de las Naciones Unidas (ONU) exigió una investigación creíble y transparente sobre la masacre perpetrada en Yemen, en la que murieron el menos 50 personas, 29 niños entre ellas.
El Consejo de Seguridad de la organización manifestó su grave preocupación por el ataque lanzado por la coalición liderada por Arabia Saudita.
En voz de la presidenta en turno de dicho consejo, Karen Pierce, quien es la embajadora de Reino Unido, la ONU llamó a todas las partes del conflicto en Yemen a cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario.
Los miembros del Consejo de Seguridad llamaron a una solución política del conflicto y subrayaron su apoyo a los esfuerzos del enviado especial de la ONU para ese país y las consultas de paz programadas para septiembre en Ginebra.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) informó que recibieron en sus instalaciones, en Sadá, los cuerpos sin vida de 29 niños, que forman parte de un total de 50 personas que murieron y 77 que resultaron heridas por el ataque de la coalición, la cual tiene al apoyo logístico de Estados Unidos.
Sobre las investigaciones, uno de los portavoces de António Guterres, secretario general de la ONU, explicó que esta se debe ser realizada por las autoridades en el terreno donde ocurrió el ataque y debe ser dirigida por las autoridades yemeníes en la ciudad de Sadá.
De acuerdo a la ONU, la guerra en Yemen ha causado desde 2015 la muerte de al menos 10 mil personas, así como la destrucción de escuelas, hospitales e infraestructura civil. Ese organismo calificó la situación como “la peor catástrofe humanitaria en el mundo”.
Por su parte, la Unicef indicó que desde 2015 alrededor de dos mil 400 niños han sido asesinados en esa nación y que más de 3 mil 600 infantes han resultado heridos.