La Organización Mundial de la Salud (OMS) enfrenta un panorama complicado después de que el presidente Donald Trump anunciara que congelará los fondos que otorga a la institución, tras acusarla de encubrir información errónea de China sobre el coronavirus.
El presidente republicano llevaba cerca de una semana lanzado críticas sobre el trabajo de la OMS, ya que a su parecer, emprendió acciones para favorecer a la nación asiática respecto a la atención de la pandemia, como la restricción a la información sobre el origen del virus.
Al congelar las contribuciones, la OMS tendrá que ajustar su presupuesto para reorganizar los recursos para sus programas e investigaciones
Si bien, desde hace años una reforma al organismo de la ONU se ha puesto sobre la mesa en varias ocasiones, en caso de que ocurriera en el corto plazo, Estados Unidos ya no podrá participar si se mantiene fuera de la institución como país miembro y donador.
No obstante, la interrupción de las contribuciones, que hasta ahora sería de forma temporal, ajusta el presupuesto de la OMS, dado que, desde hace varios años, el país norteamericano es el principal donador del organismo que tiene su sede en Ginebra, Suiza.
El impacto se verá en la disminución de los fondos que la institución que forma parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que tenía presupuestados 5 mil 840 millones de dólares para el periodo 2020-2021, pero sin la aportación estadounidense, reducirá de forma importante los recursos para financiar investigaciones y programas, entre ellas las que desarrolla sobre el Covid-19.
María Fernanda Cortés Arámburu, especialista de la Universidad La Salle, declara que esta situación pondrá en riesgo las investigaciones sobre el Covid-19, además de debilitar la cooperación internacional. Para la académica, es necesario el liderazgo de la OMS para emitir opiniones, estrategias y establecer protocolos de capacitación y manejo de la crisis a nivel internacional.
“Enfrentamos un panorama nunca antes visto. El hecho de que se suspendan las aportaciones va a generar bloqueos en el desarrollo de vacunas, pruebas y va a causar que esté menos fortalecido el sistema de alertas y esta situación puede generar grandes consecuencias sanitarias para todos los países”, opina.
Tras la noticia, diversos líderes a nivel mundial manifestaron su repudio a la decisión del mandatario de Estados Unidos, entre ellos Bill Gates, el empresario cuya fundación es el segundo donador más relevante para la OMS.
Sin embargo, este paso es uno más en el camino que el político republicano emprendió para romper relaciones con las diferentes oficinas de Naciones Unidas, como ocurrió cuando finalizó las contribuciones al Fondo de Población de la ONU (UNFPA, por sus siglas en inglés) y de la agencia que ayuda a los refugiados palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés).
En tanto, el director del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesu, lamentó la decisión del gobierno de Estados Unidos y llamó a la unidad para enfrentar la pandemia de Covid-19, durante una conferencia de prensa. No obstante, adelantó que buscarán alianzas con sus socios, tanto públicos como privados, para seguir financiando sus actividades.
Respecto a la gestión de la OMS frente a la atención, así como la difusión de la información sobre el coronavirus, dijo que será evaluada por los países miembros. “Llegado el momento, la gestión de la OMS será revisada. Sin duda, se identificarán áreas de mejora y habrá lecciones que aprender”, comentó.
Este paso es uno más en el camino que el político republicano emprendió para romper relaciones con las diferentes oficinas de la Organización de las Naciones Unidas
Cómo opera la OMS
El presupuesto para los programas de la institución se financia mediante una combinación de contribuciones señaladas y contribuciones voluntarias. Las primeras hacen referencia a las cuotas que los países pagan por ser miembros de la organización y se calculan en función de la riqueza y la población del país.
Estas contribuciones representan menos de una cuarta parte de la financiación de la OMS. El equilibrio se obtiene a través de los donativos voluntarios, los cuales son flexibles o pueden destinarse a fines o programas específicos.
Por ello, el pago de los 194 estados miembros -más dos asociados- es esencial para garantizar que haya recursos suficientes para la ejecución del presupuesto para cada uno de los programas que desarrolla la institución a nivel mundial.
En el presupuesto para el ejercicio 2020-2021, la OMS consideró distribuir los fondos en programas como la cobertura sanitaria universal, protección a emergencias sanitarias, erradicación de la poliomielitis, así como la financiación del sistema de coordinadores residentes de las Naciones Unidas, por referir algunos.
Sin embargo, para la especialista de la Universidad La Salle, sin la contribución de Estados Unidos, la OMS tendrá que replantear sus programas y reorganizar los recursos, en momentos en los cuales la atención al coronavirus se encuentra en un estado crítico.
“La situación va a poner en riesgo muchas investigaciones, la organización va a tener que replantear sus recursos para seguir apoyando a los países en momentos en que es necesario trabajar en conjunto para combatir la pandemia”, declaró Cortés Arámburu.
