Tres agentes del Servicio Secreto de Estados Unidos, responsables de la seguridad del presidente Barack Obama en Ámsterdam, fueron devueltos a su casa como medida disciplinaria por haber pasado la noche del sábado de parranda.
Aunque la ciudad de Ámsterdam tiene reputación de ‘fiestera’, los empleados del Servicio Secreto, cuyos nombres no han sido revelados, no tienen autorización para salir mientras trabajan.
El hecho fue descubierto cuando uno de los agentes se quedó dormido en el vestíbulo del hotel Huis Ter Duin y el staff del lugar dio aviso a la Embajada de EU en Países Bajos.
La indisciplina resultó más grave porque los empleados eran encargados de asegurar el sitio y el presidente Obama ni siquiera había arribado al lugar, pues estaba planeado que lo hiciera hasta el lunes de esta semana. Obama viajó a Holanda como primera parada de un viaje por Europa y Arabia Saudita, en medio del clima tenso por la crisis de Crimea.
Se espera que pronto se informen las medidas que se tomarán contra los agentes por romper un código de conducta establecido desde el incidente de Cartagena, Colombia. En esa ocasión, 10 empleados del Servicio Secreto fueron sancionados por llevar prostitutas y alcohol al cuarto donde se hospedaban durante una cumbre económica internacional. (Con información de The Washington Post)
