El próximo ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, condenó las represalias que el presidente electo Jair Bolsonaro ha recibido por parte de la opinión pública.
“La gente a veces hace declaraciones desafortunadas. No hay nada que identifique que (Bolsonaro) adoptará políticas discriminatorias contra las minorías de Brasil”, declaró Moro durante un ciclo de conferencias de derechas latinoamericanas, en Madrid.
Cuando Bolsonaro era aspirante a la presidencia, declaró que de ganar las elecciones liberaría la venta de armas a civiles con el fin de reforzar el combate a la delincuencia que se ha desatado en el país sudamericano. En materia de educación, propuso crear un colegio militar en todos los estados brasileños y modificar los planes de estudio.
“Los contenidos y métodos de enseñanza tienen que cambiar. Más matemáticas, más ciencias y portugués. Sin adoctrinamiento ni secularización precoz”, mencionó el exmilitar cuando era candidato presidencial.
Sergio Moro, el juez que condenó a prisión al expresidente Lula da Silva, aseguró que desde su perspectiva no ve un riesgo de autoritarismo por parte de Bolsonaro.
“No vislumbro en el presidente electo un riesgo de autoritarismo (…) Yo no aceptaría jamás un puesto en el gobierno si viera el menor riesgo de discriminación contra las minorías”, señaló el próximo funcionario brasileño
El también catedrático explicó que aceptó ser parte de la administración de Bolsonaro porque comprendió los compromisos institucionales y democráticos del presidente electo. Y por otra, porque lo vio con una oportunidad de impulsar la lucha de la corrupción en Brasil desde otra perspectiva de poder.
Investigan a mano derecha de Bolsonaro
El Supremo Tribunal Federal de Brasil dio luz verde a la investigación de 10 parlamentarios por posibles delitos de financiación electoral ilícita. Onyx Lorenzoni, mano derecha del presidente electo, está incluido entre los señalados.
El magistrado Edson Fachin sostuvo que entre 2010 y 2014 se registraron situaciones de recepción de dinero de forma disimulada, por lo que pidió realizar investigación exhaustiva para más tarde decidir si pide que se abra un proceso contra Lorenzoni.
La mano derecha de Bolsonaro admitió en 2017 haber recibido 100 mil reales que no fueron declarados a la Justicia Electoral en la campaña electoral de 2014.
