El movimiento #MeToo, que surgió luego de que se revelaran los abusos sexuales que el productor Harvey Weinstein realizó durante sus trabajos en Hollywood, provocó un antes y un después en la historia de las denuncias por acoso y violencia sexual.
Lo que comenzó como un hashtag focalizado en la industria del espectáculo, poco a poco fue saliendo de esa burbuja y se convirtió en un movimiento mundial que ayudó a que las mujeres sintieran el soporte necesario para alzar la voz y denunciar las veces que han sufrido acoso y violencia de género.
Ante eso, algunas víctimas masculinas de violencia o acoso sexual sienten que el movimiento #MeToo los está ignorando.
Admiran a las mujeres que están revelando sus experiencias traumáticas, como aquellas que les provoca haber sido víctimas de agresiones sexuales, pero se preguntan si los hombres que han pasado por lo mismo recibirán alguna vez la solidaridad y la comprensión que reciben las mujeres.
“El movimiento despegó con casos de mujeres únicamente y en cierto sentido hace que me sienta más solo todavía en mi condición de víctima”, afirmó Chris Borwn, profesor de música de la Universidad de Minnesota, en entrevista para la agencia AP.
Brown fue una de varias personas que en diciembre acusaron al renombrado conductor James Levine de haber abusado de ellas hace décadas, cuando eran adolescentes, motivando el despido de Levin de la Compañía de la Ópera Metropolitana.
“Históricamente, los hombres son considerados los malos de la película”, afirmó Brown. “Si algunos hombres abusan de mujeres, todos somos abusadores y… si abusan de nosotros, nos lo merecemos”.
El desencanto de Brown con el movimiento #yotambién es compartido por otros hombres que han sido víctimas de abusos, algunos de los cuales han estado usando el hashtag #MensToo (“los hombres también”).
“Nunca nos invitaron al desfile”, dijo Andrew Schmutzer, profesor de estudios bíblicos en el Moody Bible Institute de Chicago, que ha escrito sobre el abuso que sufrió de adolescente.
“Los hombres que sobreviven (a agresiones sexuales) son siempre un apéndice. Nunca somos el foco de la conversación”, manifestó.
Schmultz es uno de los fundadores de MaleSurvivor, un grupo que desde 1995 ofrece apoyo y recursos a hombres que sufrieron abusos sexuales, ya sea de niños o de adultos. Su portal, dice, ha sido visitado por cientos de miles de personas de todo el mundo.
Los psicólogos y terapeutas que trabajan con MaleSurvivor están de acuerdo con los resultados de numerosos estudios, según los cuales uno de cada seis hombres en Estados Unidos es víctima de abuso sexual durante su infancia, lo mismo que una de cada cuatro mujeres.
Hombres, víctimas de abusos también de adultos
Las violaciones son frecuentes en las prisiones y un estudio del Pentágono reveló que 6 mil 300 efectivos de las fuerzas armadas dijeron haber sido víctimas de abusos o de contactos sexuales indeseados en el 2016.
Los expertos, no obstante, dicen que los hombres son renuentes a hacer denuncias o a buscar ayuda profesional por el estigma al que se exponen o por vergüenza.
Joan Cook, profesor de psiquiatría de la Facultad de Medicina de Yale, dice que ha estado tratando víctimas masculinas de abusos sexuales por más de 20 años. “Muchos de ellos todavía tienen una mentalidad tipo John Wayne”, declaró.
“Si te pasa algo malo, lo superas callado. No lo hablas con nadie, ni contigo mismo”.
Algunos de sus pacientes temen ser considerados débiles si hablan sobre esa situación en público, señaló, mientras que otros temen ser vistos como abusadores por las experiencias de su infancia.
Según MaleSurvivor, un buen porcentaje de abusadores dicen haber sido víctimas de abusos, pero la mayoría de las personas abusadas no cometen agresiones sexuales.
El psicoanalista neoyorquino Richard Gartner, cofundador de MaleSurvivor, dice que se está prestando más atención al abuso sexual de los hombres como consecuencia de la publicidad generada por el escándalo en la Iglesia Católica Romana y, en Estados Unidos, por el de la Penn State University, donde un técnico de fútbol americano, Jerry Sandusky, fue condenado a prisión en el 2012 por el abuso de diez muchachos.
Sin embargo, Gartner argumenta que la atención estuvo enfocada en los violadores, no en sus víctimas.
Se ha generado la impresión de que los abusos de menores son obra siempre de hombres, pero Gartner dijo que los casos en que una mujer abusa de un varón “no son tan infrecuentes como piensa la gente”.
De hecho, un profundo estudio publicado en el 2005, elaborado por investigadores de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, indicó que el 40 por ciento de los abusos de varones menores de edad fue cometido por mujeres.
Además, el estudio señala que los hombres y mujeres que sufrieron abusos de niños, tienen el doble de probabilidades de intentar suicidarse en algún momento de sus vidas.