Cada vez más expresidentes peruanos se suman a la lista de acusados por el caso de corrupción de la constructora brasileña Odebrecht. La Fiscalía de Perú presentó este martes una acusación ante la justicia contra el exmandatario Ollanta Humala y la exprimera dama Nadine Heredia por supuesto lavado de activos.
Humala enfrenta una solicitud de 20 años de prisión por presunto lavado de dinero a través de aportes ilegales de la constructora brasileña y otras fuentes de financiamiento en sus campañas electorales en 2006 y 2011.
El fiscal Germán Juárez Atoche, integrante del equipo que investiga este proceso, indicó que el exmandatario y exprimera dama también son acusados de liderar una organización criminal para lavar activos. La Sala Penal deberá resolver si la acusación se ajusta a la ley y fijar la fecha del juicio.
Juárez precisó que en el requerimiento contra Heredia se piden 26 años y seis meses de cárcel porque es acusada de varios delitos: “haber percibido dinero sucio en la campaña de 2006, por actos de ocultamiento, compra de bienes y por la campaña de 2011”.
La acusación fiscal también incluyó al Partido Nacionalista, fundado por Humala y Heredia, como imputado para que sea disuelto en el caso de lograr una sentencia condenatoria. Esto se debe a que fue usado para lavar dinero.
En la campaña de 2011, que Humala ganó a Keiko Fujimori, Odebrecht entregó tres millones de dólares para la campaña del Partido Nacionalista, de los cuales un millón fueron recibidos por Heredia, según confesó el exsuperintendente de la constructora en Perú Jorge Barata a la Fiscalía peruana.
Tras la victoria electoral de Humala, Odebrecht ganó la concesión, junto a la española Enagás y la peruana Graña y Montero, del Gasoducto Sur Peruano, una obra de 7 mil millones de dólares.
Humala y Nadine estuvieron en prisión preventiva durante nueve meses por este caso. Losdos fueron encarcelados en 2017 mientras los fiscales preparaban la acusación, pero la orden de detención fue anulada por el máximo tribunal del país.
Barata testificó en Brasil ante fiscales peruanos, a quienes entregó las rutas del dinero que la constructora repartió entre los presidentes y otras figuras de poder peruanas para hacerse con contratos de obras públicas.
Los últimos cuatro jefes de estado de Perú y decenas de funcionarios menores fueron implicados en la investigación de Odebrecht después de que la compañía admitiera haber pagado sobornos en países de América Latina.
Otros presidentes
El caso de corrupción también involucra a otros tres expresidentes peruanos, entre ellos Alan García, quien se suicidó el pasado 17 de abril cuando iba a ser detenido como parte del caso.
Los testimonios de Barata implican además al exmandatario Alejandro Toledo, a quien habría pagado 31 millones de dólares en sobornos, y al expresidente Pedro Pablo Kuczynski, acusado de recibir millonarios pagos por asesorías a esa empresa mientras era ministro.
Toledo escapó a Estados Unidos, donde enfrenta una solicitud de extradición, y Kuczynski está en prisión domiciliaria.