Mario Draghi representa un reto para el presidente italiano Sergio Mattarella; espera que su dimisión no se oficialice

Tras rechazar la renuncia del primer ministro Mario Draghi, el presidente de Italia solicitó al economista explicar sus razones ante el Parlamento este miércoles. Mientras eso ocurre, se espera que el jefe de Estado logre convencerlo para permanecer en el poder, o de lo contrario llamará a unas nuevas elecciones
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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En febrero del año pasado, Italia había encontrado una solución a sus problemas: Mario Draghi, un economista que, para los ojos del presidente Sergio Mattarella, podría ayudarlos a enfrentar la crisis económica que los agobiaba.

A 17 meses de representar al pueblo italiano, la semana pasada Draghi anunció sus intenciones de dimitir, pues, según declaró, dejó de ver una unidad nacional.

“Estos días, por mi parte, ha habido el máximo compromiso para proseguir el camino común, también intentando buscar acuerdos para las exigencias que me hicieron las fuerzas políticas. Pero ese esfuerzo no ha sido suficiente”, dijo.

Esas palabras se dieron a conocer luego de que los integrantes del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) no participaran en la votación de un importante decreto de ayudas a los ciudadanos que llevaba incorporada una moción de confianza al Ejecutivo.

Al darse cuenta de esa acción, el primer ministro decidió renunciar, considerando que el M5S es una pieza fundamental para su gobierno, pues gracias a su respaldo, y al de otros partidos políticos, fue que logró concretar su coalición desde un inicio.

Si Draghi no lograba conseguir el apoyo de algún partido, la autorización de las Cámaras parlamentarias para autorizar su cargo se retrasaría, alargando su toma de posesión.

La renuncia del ministro, sin embargo, no fue aceptada por Mattarella, enviándolo a comparecer ante el Parlamento. Será hasta este miércoles que el economista expondrá su intención de abandonar el puesto. No lo pudo hacer en días previos porque debía viajar a Argelia para cerrar los acuerdos que aumentarán los suministros de gas a Italia.

De acuerdo con el maestro Carlos Ortega Robledo, internacionalista de la UNAM, a dos días de que Draghi se presente ante la Cámara aún no hay nada que esperar, sino muchas posibilidades, desde concretar la renuncia del economista hasta convencerlo para hacerse cargo de un nuevo periodo.

“Lo que menos quiere el primer ministro es que se siga polarizando la política (…) Si esto sigue así, con el hecho de que el M5S no los apoye en las políticas de Estado, probablemente veremos la salida de Draghi.

“No obstante, habrá que ver el peso que puede tener el presidente para evitarlo y para ocasionar un caos político al interior de Italia, lo que a estas alturas a nadie beneficiaría”, dice el docente.

En caso de concretarse la salida de Mario Draghi, Mattarella deberá llamar a unas nuevas elecciones para elegir al reemplazo del expresidente del Banco Central Europeo.

De llegar a ese escenario, Italia podría recibir un golpe mayor, pues no tendría otro líder, además del jefe de Estado, que los represente ante la crisis económica que agobia no sólo a todo el país, sino a la Unión Europea.

Además de la crisis económica y social que les ocasionó la pandemia de COVID-19, los integrantes del grupo de los 27 se enfrentan al incremento de los precios de los hidrocarburos, pues la mayoría de estos países recibían este suministro de Rusia, su principal proveedor de gas.

En cuanto el gobierno del presidente Vladimir Putin decidió invadir Ucrania el pasado 24 de febrero, la Unión Europea rompió los lazos que tenía con él, exponiendo su respaldo al pueblo ucraniano.

Las alternativas del gobierno a la salida de Mario Draghi

A la fecha, el presidente Mattarella aún tiene tiempo para convencer al primer ministro de quedarse en el poder por un periodo más a través de diversas propuestas.

Una de ellas es gobernar sin el respaldo del M5S, aun cuando Draghi ya había asegurado en meses anteriores que no estaría dispuesto a seguir liderando al país si ellos no estaban presentes.

En caso de que el primer ministro continúe con esa posición, los integrantes del Movimiento podrían comprometerse a participar en futuras votaciones, poniendo como principal objetivo beneficiar a sus partidarios.

Si tanto Draghi como el M5S no acceden a seguir en el mismo equipo, quien podría aprovechar esa oportunidad sería Giorgia Meloni, presidenta del Partido Hermanos de Italia.

En cuanto el primer ministro expuso sus intenciones de dejar su puesto, Meloni no perdió tiempo para asegurar que luchará por devolver al pueblo italiano lo que tienen todas las demás democracias: la libertad de elegir quién los representa, haciendo referencia a que fue el presidente quien le solicitó a Draghi tomar el cargo debido a su experiencia en el sector económico.

Hasta ahora, Meloni tiene oportunidades de tomar el poder si se considera que, aunque su grupo político tiene alrededor del 25 por ciento del apoyo en los sondeos, con el respaldo de la coalición de las derechas (La Liga y Forza Italia), llegaría a  formar un gobierno.

Mientras tanto, deberá esperar la resolución del Parlamento para seguir o no con su campaña.

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