El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cambió la letra de la famosa canción Despacito para llamar a los venezolanos a participar en la elección de la Asamblea Constituyente, sin embargo, el tiro le salió por la culata, pues los autores de la pieza reprobaron la acción y las políticas de mandatario.
“Mi música es para todos aquellos que quieran escucharla y disfrutarla, no para usarla como propaganda que intenta manipular la voluntad de un pueblo que está pidiendo a gritos libertad y un mejor futuro”, publicó Luis Fonsi en su cuenta de Twitter.
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— Luis Fonsi (@LuisFonsi) 24 de julio de 2017
El puertorriqueño agregó que en ningún momento fue consultado, ni dio su autorización para el uso y cambio de letra de la canción con fines políticos, el cantante calificó la situación de Venezuela como deplorable.
En Instagram, Daddy Yankee expresó su malestar por el hecho de que una persona como Maduro “que le ha robado tantas vidas a jóvenes soñadores y a un pueblo que lo que busca es un mejor futuro” se apropie “ilegalmente” de Despacito.
El presidente venezolano enfrenta desde finales de marzo una andanada de protestas que han dejado al menos 97 fallecidos. El gobierno ha sido blanco de críticas de organizaciones defensoras de los derechos humanos por el desempeño de los cuerpos de seguridad en la contención de las protestas.
Daddy Yankee, coautor del tema junto a Fonsi y la panameña Erika Ender, afirmó que el uso ilegal de la canción “no se compara con el crimen que cometes y has cometido en Venezuela” y afirmó que Maduro lidera un “régimen dictatorial”. Ender también rechazó el uso de la canción.
En la víspera, en su programa semanal de radio y televisión, Maduro se le vio emocionado aplaudiendo al ritmo de la versión de “Despacito” que lanzaron sus partidarios. Acto seguido, el gobernante aprobó el uso de la canción para la campaña de la elección Constituyente.
Maduro ha dicho que la elección de los miembros de una Asamblea Constituyente se realizará tal y como está previsto el 30 de julio, pese a que sus críticos locales y los “gobiernos de la coalición de derecha”, como llama a sus pares de Estados Unidos, Brasil, Colombia, Perú, entre otros, se hayan expresado en contra del proceso.
La oposición no postuló candidatos tras catalogar de inconstitucional la iniciativa porque la convocatoria de Maduro no contó con un referendo previo, como marca la ley, y sostienen que forma parte de un plan para consolidar su poder sobre las pocas instituciones que quedan fuera del control del oficialismo.
Sus adversarios convocaron el pasado fin de semana un paro cívico nacional de 48 horas entre miércoles y jueves próximo, así como otras acciones de protestas en los próximos días, como parte del conjunto de esfuerzos que denominan “Hora cero” y con la que buscan aumentar las presiones contra Maduro.