Luisa González y Daniel Noboa van a las presidenciales por representar “rostros jóvenes” en la política de Ecuador

Luisa González y Daniel Noboa son las dos opciones que siguen participando en las elecciones presidenciales de Ecuador.

Los candidatos tienen hasta el próximo 15 de octubre, día en que se celebrará la segunda jornada electoral, para acumular el máximo de electores que puedan y así relevar a Guillermo Lasso.

González es representante del Partido Revolución Ciudadana (RC5), del expresidente Rafael Correa, mientras que Noboa lidera al partido Acción Democrática Nacional (ADN) y cuenta con la experiencia de su padre, Álvaro, quien participó en cinco ocasiones como candidato presidencial.

A través de una carta dirigida a su hijo, Álvaro Noboa le demostró su apoyo al ahora candidato y le recalcó que a pesar de aquellos que hicieron todo lo posible para evitar que él llegara a la presidencia, se llevó el corazón de los ecuatorianos.

“Sé que estás preparado para las injusticias y mentiras que inventarán aquellos quienes siempre han confabulado en contra nuestra, pero quienes se sostienen en una mentira terminarán por fracasar”, se lee en la carta compartida en redes sociales.

Por su parte, el expresidente Correa también se ha manifestado en favor de su candidata, con quien, en caso de ganar las elecciones, podría encontrar el camino para regresar a Ecuador tras su exilio en Bélgica desde 2017.

“Los jóvenes quieren ver rostros distintos, están cansados de los viejos políticos y de la política tradicional”

Antes de las elecciones presidenciales, las cuales fueron adelantadas por el presidente Guillermo Lasso, ninguno de los candidatos actuales se había postulado como jefe de Estado.

En el caso de Luisa González, el doctor Fernando Neira Orjuela, investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), asegura que su juventud y el hecho de ser mujer pudieron influir en su victoria en la primera vuelta de las elecciones.

“Tampoco olvidemos que cuando Rafael Correa fue presidente el país logró un avance político y económico, lo cual suma a que los electores favorecieran a esta candidata; sin embargo, tener la sombra de Correa también puede resultarle caro para la segunda ronda”, comenta el especialista.

Respecto a Noboa, es su “rostro fresco” lo que también lo favorece y que “en los debates supo manejar más su posicionamiento” a diferencia de los otros candidatos, de acuerdo con el doctor Neira Orjuela.

“Al darnos cuenta que el padrón electoral en su mayoría está conformado por personas de entre los 16 y 40 años, eso nos dice que los jóvenes quieren ver rostros distintos, están cansados de los viejos políticos y de la política tradicional.

“Eso es lo que favorece a Noboa, quien sin duda será muy determinante para la segunda vuelta si es que logra juntar a los anticorreistas; si lo hace, es probable que gane la presidencia”, dice el investigador.

El próximo presidente de Ecuador gobernará solo hasta 2025

Una vez que se hayan concluido las elecciones presidenciales en Ecuador y exista un rotundo ganador de acuerdo con los resultados oficiales, quien releve a Guillermo Lasso tendrá un periodo de mandato de un año y medio.

A pesar de que los periodos presidenciales en Ecuador duran cuatro años, Lasso solo concluyó más de la mitad de su mandato debido a que emitió por decreto la disolución del Parlamento en mayo pasado y, al mismo tiempo, el adelanto de las elecciones presidenciales.

En ese momento, el presidente se enfrentaba a una investigación por un supuesto caso de corrupción, lo que podría orillarlo a su destitución; sin embargo, la indagación se cerró en cuanto Lasso decidió disolver la Asamblea Nacional.

A pesar de que el mandatario tenía la oportunidad de reelegirse, se retiró de la contienda argumentando que lo hacía por el bien de la democracia de su país.

En ese sentido, independientemente de quién gane las próximas elecciones en Ecuador, su mandato terminará en 2025, obligándolo a enfrentar en ese tiempo todos los retos políticos, económicos y sociales que rodean a la nación.

En cuanto haya cambio de gobierno, el próximo jefe de Estado deberá seguir con las indagaciones del asesinato de Fernando Villavicencio, candidato a la presidencia de la República que falleció tras recibió tres disparos en la cabeza tras terminar un mitin político.

Aunque el actual gobierno ya comenzó una investigación con ayuda del FBI, las indagaciones pueden extenderse al estar involucrados grupos ilícitos y narcotraficantes como José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, integrante de Los Choneros y actualmente detenido en una prisión ecuatoriana.

“Fito” fue mencionado en diferentes ocasiones por Villavicencio al asegurar que recibía amenazas de su parte por comprometerse a acabar con el narcotráfico en Ecuador.

“Es muy poco tiempo para lograr consolidar un proyecto político en un país que está tan desgarrado con el tema de la violencia y en la situación económica (…) Va a ser muy difícil para el próximo presidente o presidenta gobernar en un periodo tan corto porque va a tener que lograr acuerdos y consensos muy importantes para el Ecuador”, dice Neira Orjuela.