Los retos de Luis Arce, presidente de Bolivia, después del golpe de Estado fallido

Después del intento de golpe de Estado liderado por el general Juan José Zúñiga, el mandatario boliviano agradeció el respaldo de sus homólogos latinoamericanos
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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A Luis Arce, presidente de Bolivia, le quedan por delante diversos retos una vez terminado el intento de golpe de Estado registrado el miércoles pasado.

Lo que deja en evidencia el golpe liderado por el general Juan José Zúñiga, comparte el doctor Fernando Neira Orjuela, investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM, es la fragmentación que hay dentro del Estado boliviano.

“El presidente Arce viene enfrentando una confrontación con el expresidente Evo Morales, con partidarios que no están muy de acuerdo con su gestión, con su proyecto económico y político, y esto lo que hace es sumar esta confrontación política”, detalla el especialista.

Desde su perspectiva, “es delicado” que se haya registrado un intento de golpe de Estado porque cuando las fuerzas armadas asumen este rol de quererse apoderar del Estado por la vía armada, dejan un ejemplo de que otros lo pueden volver a intentar, “siembran elementos para que vuelva a repetirse”.

Ante ese panorama, el doctor admite que es preocupante para el presidente Arce la situación que vive considerando, además, que el año siguiente se celebran las elecciones generales en Bolivia para las que el izquierdisa está interesado en reelegirse.

Miles de ciudadanos bolivianos se citaron a las afueras del Palacio Quemado en respaldo de su presidente Luis Arce. Foto: Especial

“Por ahora logró solucionar este peso, pero traerá consecuencias en el campo político, económico y social”, admite el académico.

Aunque el investigador del CIALC asegura que es poco probable que se repita otro intento de golpe de Estado en Bolivia por el cobijo que la comunidad internacional le expresó al gobierno de Arce, el mandatario deberá demostrar a sus críticos y oponentes políticos que puede solucionar las urgencias del país.

“El sector político y económico de la derecha va a tratar de exigir más demandas que beneficios (…) Con el intento de golpe de Estado se abren nuevos frentes para estos actores que le van a pedir al presidente cumplir con lo que están exigiendo. Es una situación un poco tensa la que se le viene al presidente”, añade Neira.

Finalmente, enfatiza que el que los militares se hayan hecho a la idea de tomar el poder no deja de ser un riesgo en una región como América Latina, por lo que lo ocurrido en Bolivia debe servir como ejemplo a todos los gobiernos para evitar dictaduras.

¿Qué presidentes respaldaron al gobierno de Arce tras intento de golpe de Estado?

Durante las menos de ocho horas que duró el intento de golpe de Estado en Bolivia, el gobierno del presidente Arce recibió el respaldo de una gran parte de la comunidad internacional y de su propio pueblo.

Una vez que el general Juan José Zúñiga fue detenido y el presidente nombró a nuevos comandantes, a las afueras del Palacio Quemado se citaron miles de bolivianos en respaldo de su presidente.

En respuesta al pueblo boliviano, el jefe de Estado dejó en claro que los golpistas “lo único que hacen es dañar la imagen de la democracia boliviana a nivel internacional y generar incertidumbre innecesaria en momentos en los que las y los bolivianos” necesitan trabajar para sacar adelante al país.

Ayer, el presidente no dudó en responder a todos los jefes de Estado que se solidarizaron con el pueblo boliviano, entre ellos a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, a quien le expresó su “más profundo agradecimiento e incondicional apoyo” por condenar el golpe de Estado fallido.

A Luiz Inácio Lula da Silva y a Nicolás Maduro, presidentes de Brasil y Venezuela, respectivamente, Arce también les agradeció haber condenado las acciones del ejército de su país, al igual que a los mandatarios de Chile, Cuba y Honduras, entre otros.

En Europa, Josep Borre, alto representante de la Unión Europea para las relaciones exteriores, también se unió a la condena del golpe de Estado que, aseguró, quebranta el orden constitucional y derroca a gobiernos elegidos democráticamente.

Pedro Sánchez, presidente de España, envió al gobierno de Bolivia y a su pueblo su apoyo y solidaridad, e hizo un llamado a respetar la democracia y el Estado de derecho.

La Comisión Internacional de Derechos Humanos (CIDH), además de condenar la insubordinación militar, puntualizó que es fundamental que todas las instituciones estén subordinadas a la autoridad civil legalmente constituida.

Arce pidió al ejército retirarse de la Plaza Murillo

Fue gracias a que Arce, elegido presidente en octubre de 2020, se enfrentó al general Zúñiga que los militares se retiraron de la Plaza de Murillo, abriendo paso a la detención del uniformado.

“Si usted respeta el mando militar, dice ser un buen militar, despliegue todas estas fuerzas en este momento, general, es una orden”, se le escuchó decir a Arce mientras estaba frente al general Zúñiga, lo que fue respaldado por el equipo del presidente con gritos como “viva la democracia” y “aquí está su capitán”.

La imagen de Arce pidiéndole al ejército su retirada del Palacio Quemado, antigua sede del gobierno, le dio la vuelta en redes sociales, llegando a ser compartida por jefes de Estado como Gustavo Petro, presidente de Colombia, quien aseguró que en América “no germinan las tiranías ni las dictaduras”.

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