Las protestas del gas en Bolivia causan caos

Ciudadanos toman los depósitos de combustibles que abastecen las principales ciudades de Bolivia para demostrar su apoyo al expresidente Evo Morales y su rechazo al gobierno interino
Mariana Recamier Mariana Recamier Publicado el
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La escasez de gasolina y gas es otro elemento que se suma a las razones de las protestas y la represión en Bolivia. El difícil acceso a los hidrocarburos se intensificó con la salida de Evo Morales de la presidencia y su exilio en México.

La violencia también continúa en las calles mientras los dos principales partidos del Congreso presentaron proyectos de ley para convocar a elecciones.

La falta de combustible en La Paz y El Alto, dos de las ciudades con más habitantes en Bolivia, se debe a que simpatizantes de Morales toman los depósitos de combustible como una forma de protesta en contra del gobierno interino.

30
personas murieron en casi un mes de protestas en Bolivia

El control del depósito de Senkata, en las afueras de El Alto, es el más reciente símbolo de la lucha entre el gobierno interino y los seguidores del expresidente, de acuerdo con información de The Associated Press.

La planta de Senkata es la única que abastece de combustible y gas doméstico a los más de cuatro millones de habitantes que se suman entre La Paz y El Alto.

Los manifestantes piden la renuncia de Jeanine Áñez, presidenta interina de Bolivia, quien asegura que lidera el gobierno con el único objetivo de convocar a nuevos comicios.

La falta de combustible empeoró la situación en ambas urbes. El transporte es escaso, la basura se amontona en las calles, las filas para abastecerse de carne y otros productos son interminables y los bloqueos de carreteras impiden el ingreso de alimentos, según información de agencias.

El martes pasado, camiones cisternas, en las inmediaciones de la planta de Senkata, intentaron transportar gasolina y diesel para enfrentar la escasez derivada del bloqueo por cinco días de la carretera que enlaza La Paz con la vecina ciudad de El Alto.

8
personas murieron en la represión del martes pasado

El ejército y la policía rompieron el cerco que mantenían los seguidores de Morales en la zona. El enfrentamiento provocó la muerte de ocho personas, según confirmaron la Defensoría del Pueblo y el Instituto de Investigaciones Forenses. Hasta ahora 32 personas han fallecido en casi un mes de protestas, dos de ellos policías.

El ministro de hidrocarburos del país, Víctor Hugo Zamora, dijo el martes que estaba tratando de desbloquear las entregas de combustible para La Paz y pidió a los movimientos simpatizantes de Morales que se unan a las conversaciones y permitan que se reanude la actividad económica, para evitar el desabasto en todo Bolivia.

El gas y la gasolina son representativos del gobierno de Morales porque nacionalizó la empresa que los comercializa

Carlos Alberto Bautista, especialista en comercio internacional, explica que las personas que apoyan a Morales bloquean los depósitos de combustibles porque el expresidente recuperó los Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) como propiedad del Estado después de un periodo en el que fueron propiedad privada. Se trata de la empresa que comercializa petróleo, gas natural y productos derivados en el país sudamericano.

“Es una empresa del Estado que llegó a ser el lema de campaña de Evo Morales antes de llegar al poder”, comenta Bautista.

Morales nacionalizó los hidrocarburos el 1 de mayo de 2006 después de ganar las elecciones de 2005 con el 54 por ciento de los votos. YPFB renace y el 29 de octubre se firman nuevos contratos con las compañías petroleras privadas estableciendo hasta el 82 por ciento de regalías en favor del Estado boliviano.

El docente añade que el expresidente nacionalizó esta empresa estatal después de que cambió de forma radical en 2003, cuando encontró en Bolivia el mayor yacimiento de gas natural de todo América del Sur, después de Venezuela, pero sus directivos prefirieron exportar este recurso y provocaron el disgusto de los bolivianos.

“Eso provocó descontento social e hizo que el partido de Morales llegara al poder, entonces años después de eso resulta que el gobierno interino quiere YPFB, pero esta empresa le debe mucho al expresidente. Por eso no están a favor del gobierno de derecha”, comenta Bautista.

Por este antecedente, los ciudadanos que apoyan a Morales y los integrantes de su partido Movimiento al Socialismo (MAS) no permiten que el gas y la gasolina salgan de la planta que abastace a las principales ciudades de Bolivia como una forma de protesta y apoyo al gobierno anterior.

Es un problema social que ya afecta la distribución de alimentos, los automóviles y el gas para cocinar. Es un caos toda esa parte de Bolivia
Carlos Alberto BautistaEspecialista en comercio internacional

Elecciones en puerta para Bolivia

En este contexto, la presidenta interina de Bolivia envió el miércoles al Congreso un proyecto de ley convocando a nuevas elecciones en un intento por pacificar el país tras las últimas protestas violentas.

El mismo día, el partido del expresidente Morales, que controla la mayoría legislativa, presentó su propio proyecto en el que reconoce la renuncia del exgobernante y la de su vicepresidente Álvaro García.

Además señala que ambos dejaron el país para asilarse en México, lo cual allana el camino hacia un acuerdo político para encaminar los nuevos comicios.

Morales dijo desde México que la Asamblea Legislativa debería tratar su renuncia y rechazarla, lo cual lo habilitaría para regresar a Bolivia y concluir su gestión hasta el 21 de enero de 2020.

El expresidente agregó en rueda de prensa que si ayudan a pacificar el país las nuevas elecciones son bienvenidas, al tiempo que llamó a crear una “comisión de la verdad” que investigue los comicios del 20 de octubre, que según la oposición y una misión de observación de la OEA estuvieron marcados por diversas irregularidades.

Los dos proyectos de ley sobre las elecciones serán debatidos por las dos cámaras desde el jueves. El Congreso no tiene un plazo definido para responder, pero se espera que sea pronto dada la urgencia del asunto.

La Constitución establece tres meses para convocar a elecciones después de que asume un gobierno interino. El calendario de los próximos comicios será definido por el nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE), cuyos miembros serán elegidos en los siguiente 15 días por los legisladores.

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