La batalla final

Kofi Annan presentó el día de ayer su renuncia a la misión de las Naciones Unidas en Siria. Y se despidió lanzando críticas.

El enviado especial de la ONU al conflicto y ex secretario de dicho organismo, aseguró que las potencias mundiales fracasaron para unirse a fin de evitar la escalada de violencia que hoy impera en el país árabe.

Annan renunció a causa de lo que él consideró, una falta de capacidad por parte de la comunidad internacional liderada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para poder terminar con el fuego y auxiliar en la transición política.

La misión se ha quedado sin un líder a la espera que el secretario general Ban Ki-moon elija un sucesor.

Organismos humanitarios aseguraron que tanto el ejército como los rebeldes, han cometido  graves violaciones a los derechos humanos en lo que va de la guerra.

A la renuncia de Annan se le suman las declaraciones del miércoles pasado del presidente Bachar al Assad.

El mandatario sirio llamó a las fuerzas armadas a acelerar la lucha contra los insurgentes a quienes se refirió como “criminales terroristas”.

Argumentó que la batalla final será en Aleppo, provincia norteña y la más grande del país.

Exhortó a sus tropas a redoblar esfuerzos a fin de ganar la batalla, en un discurso publicado el miércoles.

Aleppo se desmorona

La provincia se desangra conforme pasan los días.

El Comité Internacional de la Cruz Roja reportó que unas 200 mil personas han salido de Aleppo tras el aumento de la violencia en las últimas semanas.

Naciones Unidas, por su parte, anunció que se ha podido observar una intensificación de la guerra civil debido al uso de aviones de guerra contra la oposición.

La batalla por Aleppo se ha violentado gracias al uso de armamento militar pesado.

La vocera de la misión de ONU en Siria, Sausan Ghosheh confirmó que el ejército insurgente tiene también en su poder importante arsenal militar como tanques de guerra.

Ghosheh dijo además que los monitores internacionales observaron cómo aviones de guerra dispararon contra blancos en la ciudad.

“Ayer, por primera vez, nuestros observadores vieron disparos desde un avión de guerra. También tenemos ahora confirmación de que la oposición está en situación de poseer armas pesadas”, agregó Ghosheh.

Los rebeldes intentaron tomar la ciudad, recuperando algunos vecindarios a pesar de la resistencia que opuso el ejército del régimen a través de tanques, helicópteros y aviones de guerra.

Esto ha ocasionado que la provincia viva uno de sus momentos más críticos desde que estalló el enfrentamiento civil, posterior a las protestas de la Primavera Árabe del año pasado.

Uno de los barrios capturados por los rebeldes es el de Sajur, al este de la ciudad.

No obstante, la resistencia que puedan mostrar los insurgentes se presume sea escasa dada la fuerza con la que ha atacado el ejército de Al Assad.

Según el diario El País, un puñado de rebeldes se encontraban acuartelados en una escuela del barrio Sajur con apenas unos lanzacohetes y municiones escasas para pelear contra los tanques del régimen.

A pesar de que las milicias fieles al presidente tienen mayor y mejor armamento, lo que le ha valido recuperar zonas urbanas como Homs, se enfrentan a una dinámica diferente en las zonas rurales.

En los territorios lejanos a las ciudades el control lo ostenta el Ejército Sirio Libre, el cual mantiene rodeada la ciudad de Aleppo, lo que hace pensar que la ciudad aún no está perdida.

Las palabras de Al Assad

En el discurso publicado en una revista del ejército el día nacional de las fuerzas Armadas , el cual no fue televisado, el presidente hizo ver que la guerra se encamina a su definición.

“Hoy los invitamos a aumentar su disposición y voluntad para que las fuerzas armadas sean el escudo, el muro y la fortaleza de nuestra nación”, dijo en el comunicado.

“Nuestra batalla es contra un enemigo multifacético con objetivos claros.

“Esta batalla determinará el destino de nuestro pueblo y el pasado, presente y futuro de nuestra nación”, agregó.

Las palabras del discurso hacen pensar que se seguirá con la misma estrategia usada en la provincia de Homs, pero de manera más punzante.

El ejército sirio se dedicó a atacar barrio por barrio en Homs hasta hacer sucumbir las milicias rebeldes.

A pesar del llamado de valentía y la invitación a los soldados fieles al régimen a ser “escudo, muro y fortaleza” de la nación siria, Bachar al Assad no predica con el ejemplo.

Desde el 18 de julio que estalló la bomba en Damasco y mató a cuatro de sus más cercanos colaboradores en temas de seguridad, el mandatario no ha aparecido en público.

A lo anterior se le suman los rumores de que, tras el atentado contra su cuñado y otros ministros de seguridad no muy lejos de su residencia, Al Assad mandó resguardar a su familia fuera del país.

Después de la renuncia de Kofi Annan y las palabras de Al Assad, el final de esta guerra puede ser más complicado de lo que se espera.

NO HAY SIGNOS DE UNA SALIDA PACÍFICA
Por Indigo Staff

El presidente Bachar al Assad no muestra pistas ni  deseos de ceder el poder.

Según expertos de estudios en Medio Oriente y oficiales de Estados Unidos, el presidente sirio se dirige a un largo, sangriento y potencialmente catastrófico capítulo final de la guerra civil de su país.

Sus comentarios públicos y privados hacen pensar que el mandatario se prepara a seguir el ejemplo del fallecido líder libio Muammar Gaddafi.

Un creciente consenso en Washington y en las capitales de Medio Oriente apunta a que Al Assad, que fue considerado en algún momento como un hombre moderado, solamente será removido del poder a través de su muerte o su captura.

“No habrá negociaciones con él”, dijo Jeffrey White, ex analista de Medio Oriente de la Agencia de Inteligencia y Defensa del Pentágono.

“Él caerá peleando y probablemente lo haga en Damasco”, agregó White.

Mientras sea imposible predecir con certeza qué hará Al Assad si se enfrenta a una inminente derrota, sus movimientos sugieren, por lo pronto, que seguirá volviendo más agresivo el combate.

La semana pasada, los líderes de las 22 naciones de la Liga Árabe pusieron en marcha un nuevo plan para que el presidente sirio transfiera el poder a cambio de su exilio.

El primer ministro de Qatar, Hamad Bin Jasim al-Thani, llamó a Bachar Al Assad a tomar la “decisión valiente” de hacerse a un lado por el bien de su país.

Sin embargo, las propuestas realizadas por varios países árabes terminaron por ser desechadas en Damasco.

Analistas militares piensan que la ferocidad con la que atacan las tropas fieles al régimen es una muestra clara de que el dictador piensa que su única opción es pelear hasta el final.

(Con información de The Washington Post).