Este jueves 19 de abril cambiará la historia de Cuba. El apellido Castro dejará la presidencia de la isla para dar paso al gobierno del candidato Miguel Díaz-Canel. El hombre de 57 años promete dar continuidad al régimen de Raúl Castro, pero también es una oportunidad para que la política cubana quede en manos de una generación que nació después de la revolución de 1959.
La Asamblea Nacional de Cuba nominó hoy a Díaz-Canel como candidato sin oposición para reemplazar a Raúl. El hombre que hasta ahora había ejercido como primer vicepresidente de Cuba fue votado por los 604 diputados. El resultado se anuncia mañana oficialmente, pero ya no hay duda de que será el nuevo líder de la isla.
Díaz-Canel ejercerá un mandato de cinco años como presidente. Existe la posibilidad de que renueve su gobierno un lustro más, pero no se podrá extender más de una década debido al límite de dos legislaturas establecido por Raúl.
Además, el nuevo presidente se mantendrá bajo la tutela de Raúl, quien permanecerá hasta 2021 como primer secretario del Partido Comunista, organismo máximo de decisión en la isla. Al ser elegido como candidato por la Asamblea Nacional en un acto en el que estuvo presente Raúl, Díaz-Canel no muestra ni una pizca de opositor al régimen, al contrario, su gobierno promete dar continuidad a la línea socialista de los Castro y a las reformas de los últimos años.
El próximo presidente es un ingeniero en electrónica que ha escalado poco a poco en el poder durante tres décadas. Además de sus estudios en ingeniería, Díaz-Canel realizó su servicio militar obligatorio hasta 1985. En 1987 se incorporó a la Unión de Jóvenes Comunistas y empezó a trabajar como profesor mientras viajaba a Nicaragua como parte de una delegación de apoyo al sandinismo. Después fue primer secretario en diferentes provincias hasta que se convirtió en primer vicepresidente.
