Para cualquier país, las elecciones generales son uno de los eventos políticos más relevantes, ocasionando casi siempre un conflicto impulsado por el candidato que resultó perdedor. El 7 de junio del año pasado, por ejemplo, en Perú se generó una disputa luego de confirmarse la victoria de Pedro Castillo, pues según la candidata opositora, Keiko Fujimori, el líder sindical se llevó la jornada debido a un fraude electoral.
Con ese argumento, el partido de la tres veces aspirante presidencial, Fuerza Popular, presentó seis denuncias contra el tribunal electoral de su país, asegurando que el día de las votaciones hubo falsificación de firmas y suplantación de identidad entre los interventores.
Debido a esas acusaciones, la oposición estuvo detrás de la nueva administración por casi siete meses a través de señalamientos y protestas, hasta que el Jurado Nacional de Elecciones de Perú desestimó sus argumentos, detallando que en cuatro regiones los fiscales comprobaron que no se violó ninguna ley durante la segunda vuelta de la jornada general.
Bajo esa línea, el Ministerio Público notificó que no encontró los elementos que justificaran continuar con la investigación por el supuesto delito de falsificación de documentos en las mesas de votación de Áncash, Cajamarca, San Martín y Arequipa; territorios en los que desde un inicio Fujimori iba generando menos votos.
#ConteoRápidoAméricaIpsos Resultados por regiones del conteo rápido al 100% @noticiAmerica @canalN_ pic.twitter.com/jM1gamOnzw
— Ipsos Perú (@ipsosperu) June 7, 2021
Ante la decisión del tribunal, la hija del expresidente Alberto Fujimori perdió una de sus cartas más fuertes para seguir luchando contra la victoria de Pedro Castillo, con quien protagonizó una de las jornadas más cerradas de su Estado.
Mientras que el líder sindical y representante del partido Perú Libre obtuvo 18.921 por ciento de los votos, Fujimori alcanzó 13.407, diferenciándose con sólo 5.514 puntos, de acuerdo con datos registrados por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
Bajo ese panorama, no se espera que la representante de la oposición vuelva a presentar un nuevo argumento contra el gobierno actual, debido a los resultados de las instituciones electorales y al curso que ha llevado el mandato del presidente, así lo señala la doctora en Estudios Latinoamericanos Claudia Edith Serrano, internacionalista de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón.
“Con la investigación que generaron las instituciones en ese país y el curso que lleva el gobierno de Pedro Castillo, ya no habría un mecanismo bajo el cual Keiko Fujimori mantuviera este cuestionamiento hacia los resultados de la elección. Se desvaneció esa oportunidad.
“El mejor momento para ello fue cuando se dieron los resultados, ahí había más posibilidad de avanzar con esta impugnación, porque fue una elección bastante cerrada”, dice la académica.
Del mismo modo, sostiene que, en caso de impulsar un nuevo argumento contra el líder del Ejecutivo, eso sería un desgaste mucho mayor para la opositora, llevándola a protagonizar más bien un golpeteo político que propiamente un intento por defender a su partido.
Keiko Fujimori, en espera de resurgir
Con una imagen política golpeada tras la decisión del Jurado Nacional de Elecciones de Perú de archivar las denuncias que impuso el partido Fuerza Popular, se prevé que Keiko Fujimori conserve un perfil bajo, al menos en el corto y mediano plazo.
Mientras tanto, se espera que la política refuerce su representatividad, tomando en cuenta que actualmente sigue siendo una de las figuras más relevantes de la oposición peruana, ya que no hay un personaje que pueda sustituirla a pesar de que ha estado relacionada con el caso de la empresa Odebrecht.
47% de peruanos cree que Keiko Fujimori es la principal líder de la oposición en el Perú. @politica_ECpe #IpsosPeru
Más detalles 👇https://t.co/oihP4TZcmz pic.twitter.com/1QgnaChrLb— Ipsos Perú (@ipsosperu) January 16, 2022
Al respecto, la también posdoctorante de la Unidad Académica de Estudios Regionales (UAER) de la UNAM, Claudia Edith Serrano, añade que el reto en este momento para la oposición es quizás encontrar otro líder que pueda llegar a tener el reconocimiento de Keiko por parte de los votantes o la ciudadanía.
Pero mientras eso sucede, se prevé que el desgaste político de la ahora excandidata vaya en aumento, pero con el paso del tiempo vuelva a incursionar en la vía política de su nación.
“Hay que tomar en consideración que las fuerzas de la oposición, normalmente en el caso de los partidarios de centro o derecha, siempre tienden a esperar un momento para aminorar el desgaste de su imagen, volviendo a retomar o tratar de volver a incursionar en la política de su país.
“Entonces, me parece que la decisión del Jurado Nacional no va a aniquilar por completo que esta política peruana siga participando y teniendo incidencia como parte de la oposición política de Perú”, apunta Serrano.