JPMorgan Chase demandó a Tesla Inc por 162.2 millones de dólares, acusando a la compañía de coches eléctricos de Elon Musk de violar “flagrantemente” un contrato del 2014.
Al parecer en este año, Tesla vendió al banco unos warrants, los cuales otorgan al titular el derecho a comprar acciones de una empresa a un precio y en una fecha determinada.
La demanda fue presentada en un tribunal federal de Manhattan, y aunque es inusual que un banco de Wall Street demande a un cliente de tan alto perfil, la acusación ocurre tras unos tuits de Elon Musk realizados en 2018.
De acuerdo con JPMorgan, se revisó el precio de sus warrants de Tesla, como resultado de un tuit de Musk de 2018 en el que dijo que estaba considerando retirar las acciones de la empresa de la bolsa.
“Hemos proporcionado a Tesla múltiples oportunidades para cumplir con sus obligaciones contractuales, por lo que es desafortunado que hayan forzado este asunto a un litigio”, dijo un portavoz de JPMorgan en un comunicado.
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El tuit de Musk del 7 de agosto de 2018 sugiere que podría sacar a Tesla de la bolsa pagando 420 dólares por acción y que tenía “financiación asegurada”, pero 17 días después aclaró de que abandonaba el plan, lo que causó una importante volatilidad en el precio de la acción, dijo el banco.
El precio de las acciones de Tesla se multiplicó aproximadamente por 10 en el momento en que los warrants expiraron este 2021, y JPMorgan exige a Tesla a entregar acciones o dinero en efectivo, según lo estipulado en el contrato.
El pasado 11 de noviembre y luego de prometerlo en Twitter, el director general de Tesla, Elon Musk, vendió unos 4,5 millones de acciones del fabricante de autos eléctricos, una operación que le reportó más de 5.000 millones de dólares.
Las ventas, reveladas en 10 documentos regulatorios presentados el miércoles en la noche, equivalen a aproximadamente el 3 por ciento de la participación de Musk en la compañía.
