Italia es uno de los países más golpeados por la crisis sanitaria de la pandemia de Covid-19. Las imágenes del ejército italiano transportando decenas de féretros a las afueras de la provincia de Bérgamo, Lombardía, dieron vuelta al mundo, mientras evidenciaban el nivel de la emergencia en el viejo continente.
La realidad parecía inminente: a Italia la sobrepasó el número de decesos por Covid-19 y, a la par del duelo por las pérdidas humanas, se abrió la puerta a una crisis ante las cifras de desempleo y el descontento de algunos ciudadanos que peleaban por alimentos.
Cuatro meses después del primer caso de coronavirus detectado y tras el paro total de las actividades no esenciales, el país que preside Sergio Mattarella se prepara para reactivar su economía, aunque pequeños comercios, como restaurantes o cafeterías, abrían sus puertas más adelante.
Sin embargo, el mundo enfrenta la llegada de la inminente recesión, mientras expertos proyectan que las economías de Francia y Alemania caerán a niveles parecidos a los del final de la Segunda Guerra Mundial y todo indica que en Italia se dirige hacia ese camino.
Los síntomas de una mala economía comienzan a sentirse entre la población. En las ciudades del sur, como Nápoles, Palermo y Reggio Calabria, italianos que salen del supermercado con bolsas de víveres sufren asaltos por otros no tienen qué comer. En Palermo, un hipermercado registró el primer saqueo perpetrado por una decena de personas desesperadas que no tenían para pagar los productos que llevaban en sus manos.
En tanto, las otras cifras –las de la pandemia-dan un respiro a la población, ya que parece que el país logró aplanar la curva del número de infectados y de decesos, lo que parece ser los primeros pasos hacia la contención del Covid-19.
El primer caso de coronavirus en Italia se confirmó el 30 de enero. Desde esa fecha el incremento de las personas con el virus creció de forma exponencial y constante, pero las alarmas se prendieron el 26 de febrero, cuando las víctimas de la pandemia superaron los cien casos.
A inicios de marzo, los decesos se contaban en miles, hasta que el 21 de marzo el número de víctimas llegó a 6 mil 557 casos, mientras el presidente Mattarella hacía un llamado a la unidad, como en los años que precedieron a la Segunda Guerra Mundial.
Dos semanas después, el 8 de abril, el número de decesos disminuyó a 604 víctimas. El numero toral de decesos es de 17 mil 127 personas. Los casos de contagios suman 135 mil 586 con 94 mil 067 contagios activos, la cifra más baja desde el 10 de marzo.
Todo indica que el país del viejo continente se encamina a la normalidad, aunque para Silvio Brusaferro, director de salud pública de Italia, la vida no volverá a ser como antes del virus.
“Incluso cuando los nuevos casos de coronavirus caigan a cero, la vida no volverá a ser como antes durante mucho tiempo”, dijo Brusaferro.
