Un joven de 15 años de edad huyó de un centro de refugiados en la ciudad de Brownsville, Texas, y la policía de la ciudad no ha podido encontrarlo.
Diversas agencias de información en los Estados Unidos han dado cuenta de que el menor de edad, de quien no se ha revelado su nombre o nacionalidad, estaba detenido en el centro Casa Padre desde hace 36 días, pero salió corriendo y habría saltado a un lago cercano.
El suceso ocurrió la tarde de este domingo; este lunes, los bomberos también buscan al menor en el lago, pues se habla de la posibilidad de que se haya ahogado.
La cadena CNN reportó este lunes que ha hablado con gente cercana al menor, quienes han comentado que las autoridades estaban en vías de reunir al joven con un hombre residente en la ciudad de Dallas que dijo ser su papá; aunque después descubrieron que éste no era el padre biológico.
En estos días se seguiría el proceso para determinar cuál era el vínculo familiar entre ambos, pero el menor escapó del centro. Se dice que el joven es originario de Honduras.
Según las personas con las que CNN habló, el menor habría regresado a México cruzando el Río Bravo y desde Matamoros habría llamado a su padre —el hombre residente en Dallas—, quien le enviaría dinero para regresar a Honduras, su país.
Las personas que administran y vigilan los centros de refugiados, como han sido llamados, pertenecen a una organización sin fines de lucro llamada Southwest Key.
Quienes estaban al frente de este centro en Brownsville señalaron que ellos no estaban capacitados para detener al menor, y que si cualquiera de ellos decide irse, deben llamar a la policía.
El centro Southwest Key en Brownsville, Texas, es el más grande de los que resguardan a los niños migrantes indocumentados, con más de mil menores bajo su techo. Antes, el lugar era una tienda Walmart, que fue acondicionada para recibir a los menores.
