El huracán Helene tocó tierra como una poderosa tormenta de categoría 4 el jueves por la noche en una región escasamente poblada de Florida, causando estragos en la costa del golfo. Con vientos máximos sostenidos de 225 km/h, el ciclón arrancó el revestimiento de edificios, dejó a millones sin electricidad y atrapó a numerosos residentes en crecientes inundaciones.
El gobernador de Georgia, Brian Kemp, informó en una conferencia de prensa que al menos 11 personas han perdido la vida en su estado como resultado del huracán, y decenas más siguen atrapadas en sus hogares. Las autoridades estiman que hay alrededor de 115 estructuras con personas dentro que requieren asistencia.
Helene hizo su llegada cerca de la boca del río Aucilla, en el área rural de Big Bend, donde se encuentran poblados pesqueros y sitios vacacionales. En las redes sociales, se compartieron impactantes videos que mostraban cortinas de lluvia y revestimientos desprendiéndose de edificios en la localidad de Perry, Florida. Una estación local de noticias mostró una casa completamente derribada por la fuerza del viento.
Comienzan las labores de rescate tras paso de Helene
La mañana del viernes, equipos de rescate se movilizaban en botes para auxiliar a quienes estaban atrapados por las inundaciones en el condado de Citrus, ubicado a unos 193 kilómetros al sur de Perry. Las autoridades instaron a los ciudadanos a no intentar cruzar las inundaciones y a llamar a los rescatistas si necesitaban ayuda, advirtiendo sobre la posibilidad de cables eléctricos caídos, aguas contaminadas y objetos peligrosos.
Hasta el viernes por la mañana, aproximadamente 4 millones de viviendas en Florida, Georgia y Carolina del Sur carecían de electricidad, según el sitio web poweroutage.us, que rastrea los reportes de servicios públicos.
Imponen toque de queda en Georgia
Las autoridades del condado de Thomas, Georgia, extendieron un toque de queda hasta la tarde del viernes, citando la peligrosidad de las condiciones. “Este toque de queda ayuda a proteger a los rescatistas y a los ciudadanos de nuestra comunidad. Por favor, no salgan de su refugio”, instó la comisaría en una publicación en línea.
Helene es la tercera tormenta que golpea esta ciudad en poco más de un año. La tormenta tropical Debby dejó sin electricidad a miles en agosto, y el huracán Idalia causó daños a cerca de mil viviendas en Valdosta y el condado de Lowndes el año pasado. Con la recuperación aún en marcha, la comunidad se enfrenta a otro reto devastador.
Con información de AP