Holanda le dice “no” a la ultraderecha

Holanda le dijo “no” a la ultraderecha este miércoles, pues el partido del legislador anti islamista Geert Wilders, no obtuvo los resultado esperados. Los resultados preliminares señalan que el partido del primer ministro Mark Rutte se impuso en los comicios.

Las principales encuestas de salida indican que el partido de Rutte ganó 31 escaños en la legislatura de los 150 curules, 12 más que el partido de Wilders, que compartió el segundo lugar con otros dos partidos.

“Esta es una oportunidad para que una gran democracia como Holanda resalte y detenga esta caída de fichas de dómino populistas”, dijo el primer ministro de Holanda en conferencia de prensa y agregó que siente orgulloso por la decisión de los votantes.

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Wilders reconoció su derrota, pero advirtió que su partido será una férrea oposición para el partido oficialista e insistió que este resultado no va a desaparecer el tipo de política populista qué representan él y otros de Europa.

Las elecciones holandesas centraron la atención de toda Europa, pues Wilders representaba la primera prueba para esta clase de política en Europa, el político ha sugerido que Holanda expulse a musulmanes, deje de adra dinero a otros países y se salga de la Unión Europea.

“El Islam se disfraza de religión, pero es ideología. Estoy seguro que sí hubiera templos nazis en Holanda se montaría un escándalo. Créanme la ideología islámica es incluso más peligrosa. Queremos hacer nuestra propia Holanda”, dijo Wilders hace unos días en entrevista.

“Cerrar las fronteras, quedarnos con el dinero que le damos a los extranjeros, son miles de millones que van a África, a Bruselas, a Grecia, a los refugiados, vamos a acabar con eso y devolverles su dinero a los holandeses que viven aquí”, agregó el político holandés.

El legislador de ultraderecha, también conocido como el ‘Trump Holandés’ es uno de los cuatros personajes en Europa que han comenzando a tomar fuerza en los últimos años con propuestas similares y plantean la salida de las naciones de la Unión Europea.

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Francia es la siguiente prueba, allí la candidata de extrema derecha Marine Le Pen ha marcado el tono de la campaña electoral con sus férreas posturas contra la inmigración y la globalización, por lo que también esta en la mira de Europa y el mundo.

En Italia una fuerza importante es la Liga del Norte, contraria a la inmigración y que ha ganado terreno ante el creciente malestar con la llegada de migrantes. La Liga saca por sí sola el 13 por ciento de los votos, pero puede aliarse con otros partidos.