Gustavo Petro, primer presidente de izquierda en Colombia que viaja a Estados Unidos 

Por primera vez los presidentes de Colombia y Estados Unidos se reunirán para reforzar sus intereses bilaterales en materia de seguridad, cambio climático y democratización de la región; un viaje que ayudará al mandatario colombiano a desechar las críticas en su contra por su ideología de izquierda
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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Los presidentes de Estados Unidos y Colombia, Joe Biden y Gustavo Petro, respectivamente, se reunirán hoy en la Casa Blanca.

Esta será la primera vez que un mandatario colombiano de izquierda viaja a Washington para reforzar sus lazos bilaterales con su mayor socio comercial y de inversión.

Según dio a conocer la Casa Blanca, entre los temas que abordarán ambos jefes de Estado están la seguridad y el control del narcotráfico; rubros en los que la Unión Americana ha apoyado a Colombia con el envío de recursos económicos.

De acuerdo con el Departamento de Estado de Estados Unidos, de 2016 a 2021 se le brindó a Colombia más de mil millones de dólares en apoyo directo e indirecto para la implementación de la paz.

En 2022, sin embargo, la inseguridad siguió estando presente en Colombia. La Encuesta de Convivencia y Seguridad Ciudadana (ECSC) del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) publicó en su último informe que la percepción de este problema aumentó en ciudades como Cali, Cartagena, Bucaramanga, Villavicencio, Barranquilla y Medellín, entre otras.

En esa materia, el presidente Gustavo Petro podría abordar con su homólogo la Ley de la Paz Total, con la cual pretende acordar negociaciones con grupos armados ilegales en el país para controlar la inseguridad.

“Me parece que el presidente Petro busca que Estados Unidos sea un país garante, que apoye y contribuya a lograr esa paz total con la que pretende tener una renegociación con los narcos; algo que no ha sido fácil de vender internacionalmente, pero que constituye en este momento algo esencial para llegar a esa pacificación”, opina el doctor Fernando Neira, investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM.

Para el especialista en la región, la visita de Petro a Estados Unidos representa un momento importante porque lo ayuda a desaparecer la etiqueta que se le impuso durante la campaña electoral de un político que podría hacer de su país algo negativo, como así ha sucedido en otras naciones gobernadas por administraciones de izquierda.

“Sin embargo, no ha sido así. Estamos ante una nueva ola de gobiernos progresistas, como en Chile, que tienen claro que el ejercicio del poder implica una gran responsabilidad económica, política y social.

“En esa medida, esta reunión entre el presidente Gustavo Petro y Joe Biden es un reconocimiento al colombiano, a su gestión y a lo que logró de manera democrática”, opina el investigador.

El interés en Venezuela

Durante la reunión entre Petro y Biden también se abordará el desafío de promover los valores democráticos y los derechos humanos y laborales en la región y el mundo, según comunicó la Casa Blanca.

Bajo esa línea, es el caso de Venezuela un punto de interés para ambos países al ser un Estado sancionado económicamente por la Unión Americana por carecer de democracia en sus ejercicios electorales.

A diferencia de Estados Unidos, Colombia comenzó a reforzar sus lazos bilaterales con su vecino luego de cuatro años de mantener congeladas sus relaciones diplomáticas.

Con el gobierno entrante de Petro fue que Colombia y Venezuela reanudaron sus lazos y no sólo sus representantes diplomáticos volvieron a ejercer sus deberes, sino que sus respectivos jefes de Estado se reunieron en cuatro ocasiones.

Es con el liderazgo comandado por el mandatario colombiano con el que Joe Biden podría apoyarse para negociar una solución y se logre la democratización en Venezuela, de acuerdo con el doctor del CIALC de la UNAM.

“El liderazgo que ha tenido Gustavo Petro en la relación con Venezuela se vuelve una buena excusa para que el gobierno norteamericano se apoye en él para buscar una salida democrática a la situación venezolana.

“Con una negociación entre ambas partes esperemos que salga una solución que contribuya a lo que está pasando en Venezuela en términos económicos, políticos y sociales y este país vuelva a tomar la senda de la democracia y de los beneficios para la mayor parte de la población”, indica Neira.

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