Ni los insultos racistas contra los hispanos, ni la manera en que se reveló que Trump habla de las mujeres bastaron para su base fiel de seguidores disminuyera, con lo que evitaron que Clinton se convirtiera en la primer presidente estadounidense.
El republicano Donald Trump arrasó la elección presidencial y ganó en los conteos preliminares los 270 votos para la presidencia de los Estados unidos ante una Hillary Clinton que presentió la derrota desde horas antes que las tendencias comenzaran a revertirse en favor de su oponente.
Trump logró más de los 270 votos electorales necesarios para ganar la elección, los cuales obtuvo al ganar en estados clave como Texas, Ohio y Florida, además de entidades pequeñas que sumadas resultraon en una importante fuerza.
La conquista de California, Nueva York y la costa noreste no le alcanzó a la demócrata para convertirse en la primera mujer presidenta de Estados Unidos. El vocero de Clinton señaló que la candidata no hablará durante esta noche.
“Acabo de recibir una llamada de la secretaria Clinton, nos felicitó por nuestra victoria. Hillary ha trabajado por mucho y le debemos gratitud por su servicio al país, lo digo sinceramente, ahora es momento que Estados Unidos sane las heridas de la división”, señaló Trump en su discusro de víctoria.
“Seré presidente de todos lo estadounidenses, para quienes decidieron no apoyarme les tiendo la mano, les pido su ayuda y orientación para unificar a este gran país, la nuestra no fue una campaña, sino un gran movimiento de gente que quiere un mejor futuro”, dijo Trump.
“Nos llevaremos bien con todas las naciones que quieran llevarse bien con nosotros. Debemos recuperar el destino de nuestro país y soñar en grande, quiero decirle a la comunidad mundial que trataremos a todos con justicia, buscaremos un terreno común”, señaló.
Clinton ganó los votos electorales de Washington, Oregon, California, Hawaii, Nevada, Colorado, Nuevo México, Minnesota, Illinois, Virginia, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Columbia, Delaware, Connecticut, Rhode Island, Massachusetts, Vermont y Maine.
Mientras que Clinton se quedó con Idaho, Montana, Dakota del Norte, Wyoming, Dakota del Sur, Utah, Nebraska, Iowa, Arizona, Missouri, Kansas, Texas, Oklahoma, Arkansas, Lousiana, Mississippi, Indiana, Tennessee, Alabama, Ohio, Kentucky, Georgia, Floridad, West Virgina, Carolina del Sur, Carolina del Norte, Michigan, Wisconsin, Pensylvania y Alaska.
Ni los insultos racistas contra los hispanos, ni la manera en que se reveló que Trump habla de las mujeres bastaron para su base fiel de seguidores disminuyera, con lo que evitaron que Clinton se convirtiera en la primer presidente estadounidense.
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Despué de una confianza sobrada por parte de los mercados en la víspera tras conocer las encuestas que daban amplia venteja a Cliton, la noche del martes, el tipo de cambio del peso frente al dólar rebasó los 20 pesos.
Trump recuperó para el Partido Republicano la presidencia, la cual no lograba desde 2004 cuando George W. Bush logró la reelección y que en los últimos ocho años había estado bajo el control de los demócratas con Barack Obama.
El partido republicano también logró retener la ventaja en la Cámara de Representantes y en el Senado, por lo que Trump se lleva el carro completo. De esta manera, el magnate podría tener vía libre en cuanto a sus iniciativas, tales como la construcción del muro fronterizo.
A lo largo de su campaña, Trump se enemistó con los latinos, las mujeres, los afroamericanos y miembros de su propio partido, por lo que se pensaba que las probabilidades que tenía para llegar a la Casa Blanca eran pocas.
Entre las propuestas del magnate se encuntran deportar a los 11 millones de inmigrantes indocumentados que hay en Estados Unidos, además de construir un muro fronterizo, financiado por México, para evitar el flujo migrante desde México.
Trump también ha prometido que buscará disolver el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. El republicano también ha señalado que disminuirá el apoyo económico a la OTAN, entre otros organismo internacionales.
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