Francia prohíbe piropos, chiflidos y cualquier forma de acoso callejero en contra de mujeres
Esta medida llega días después de que una dama fuera golpeada por un agresor que primero le empezó a chiflar en la calle y ella le gritó que se callara, además la víctima creó un sitio web donde más mujeres pueden compartir sus historias de forma anónima
Hidalgo NeiraTodo empezó con un chiflido en un día afuera de un café parisino, un hombre se creyó con la ventaja de poder halagar a una mujer, pero esta no lo tomó a bien y la violencia comenzó.
Marie Laguerre de 22 años de edad le gritó al hombre que se callara y este le abofeteó a la fémina para después retirarse del lugar, aunque la agresión quedó impune, todo quedó grabado en video.
La cafetería dio el video de vigilancia a Laguerre quien lo hizo público en YouTube el 28 de julio, a cinco días de estar en el portal ya alcanzó más de cinco millones de vistas y las reacciones legales no se hicieron esperar en Francia.
El país liderado por Emmanuel Macron votó a favor por endurecer la ley y castigar el abuso sexual en la vía pública, sobretodo como lo ocurrido a Laguerre, por lo que ahora queda prohibido hacer comentarios o tener comportamientos sexistas que sean obscenos, hostiles, intimidatorios, degradantes, ofensivos o humillantes y las multas inician desde los 90 y alcanzan los 750 euros.
Laguerre tampoco se ha quedado callada, lanzó el sitio “Nous Toutes Harcelemen” (que en español sería Todos nuestros acosos) e invita a que más mujeres sumen sus experiencias vividas de hostigamiento sexual de manera anónima donde quiera que esto haya ocurrido.
El portal que se encuentra en francés en la dirección www.noustoutesharcelement.fr fue una iniciativa de la también estudiante debido a que cuando hizo público el video y la denuncia sexual, empezó a recibir comentarios de más mujeres que también habían sido violentadas.
“No debemos quedarnos calladas”, publicó en un comentario adjunto al video que también compartió en Facebook y a pesar de que sabe que su iniciativa no es nueva, la intención es reforzar las historias de vulnerabilidad que siguen ocurriendo día a día en torno al abuso contra mujeres.