Esta tarde, el FBI informó que ha obtenido acceso al teléfono de Thomas Matthew Crooks, un joven de 20 años señalado como responsable del intento de asesinato del expresidente Donald Trump, quien ahora es candidato republicano.
A través de un comunicado, la agencia de investigación dio a conocer que sus especialistas técnicos consiguieron con éxito acceder al teléfono del atacante.
De ese modo es que se continúan analizando los dispositivos electrónicos de Crooks en lo que compone esta ardua investigación en torno al intento de asesinato contra Trump.
Hasta ahora, el FBI considera que este evento fue un potencial acto de terrorismo local; sin embargo, también aclaró que la investigación se encuentra en sus primeras etapas.
De hecho, cerca de 100 entrevistas se han realizado con personal de las fuerzas del orden que se encontraban en el mitin donde Trump fue disparado, así como algunos testigos.
🇺🇸 INTENTO DE ASESINATO A TRUMP 🇺🇸
🇺🇸 | BlackRock, el administrador de dinero más grande del mundo, retira un anuncio del 2022 que presenta al tirador de Trump, Thomas Matthew Crooks. pic.twitter.com/zdzf1FYFST
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) July 15, 2024
“Se supone que debería estar muerto”, dice Donald Trump
Por su parte, Donald Trump afirmó haber sobrevivido milagrosamente a un intento de asesinato durante un mitin de campaña en Pennsylvania.
“Se supone que debería estar muerto”, declaró el expresidente y actual candidato presidencial republicano.
En una entrevista a bordo de su avión privado con el diario The New York Post (NYP), Trump describió la “experiencia muy surrealista” que casi le costó la vida.
La conversación se realizó mientras se dirigía a la Convención Nacional del Partido Republicano, que comienza este lunes en Milwaukee.
“El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo calificó de milagro”, explicó Trump, quien llevaba un gran vendaje blanco suelto cubriendo su oreja derecha.
Según el NYP, su equipo insistió en que no se tomaran fotos.
“Se supone que no debería estar aquí, se supone que debería estar muerto”, repitió Trump. “Se supone que debería estar muerto”.
Finalmente, el expresidente relató que si no hubiera girado ligeramente la cabeza hacia la derecha para leer un gráfico sobre inmigrantes ilegales, el disparo que le hirió la oreja y le salpicó sangre en la frente y la mejilla podría haber sido mortal.