Familiares de Andrés Elena, residente de Candelario, en Salamanca, España fallecido por coronavirus, acusan acoso por parte de ciudadanos y autoridades del pueblo.
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El pasado 9 de marzo la hija de Andrés, quien tenía 72 años de edad, llamó al servicio de urgencias para reportar que su padre tenía un grave problema de insuficiencia respiratoria.
El hombre se quedó en urgencias hasta que un hijo suyo llegó a la ciudad y preguntó si a su padre le había sido aplicada la prueba del coronavirus.
Sí se la habían realizado, pero resultó negativa, sin embargo, al volvérsela a aplicar el resultado no dio lugar a dudas: Elena tenía coronavirus.
El alcalde de Candelario publicó un bando, algo similar a un comunicado, en el que informaba que en el pueblo existía un caso de coronavirus y en el que llamaba a quienes estuvieron en contacto con el hombre a manterse en cuarentena voluntaria.
Sin embargo no se citaba el nombre del enfermo dando a entender que la gente sabía quien era.
Andrés Elena falleció el día 14 de marzo después de permanecer cinco días en urgencias.
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Mientras vecinos de Candelario realizaban actos vandálicos y pintas en el lugar después de conocer la noticia de la muerte del paciente con Covid- 19.
Muchos le acusaron de introducir el coronavirus en el pueblo y otros tantos realizaron pintas con su nombre, los hijos del fallecido acusan al alcalde de hacer de su padre un “apestado” y de estigmatizara su familia.
En mi pueblo están acosando a la familia del primer muerto por coronavirus, culpándole de llevar la enfermedad al pueblo. Y han pintado su nombre en las paredes. Qué horror.
— Jimina (@Jimina_Sabadu) March 18, 2020
