El presidente Donald Trump prohibió este viernes a su secretario de Estado, Mike Pompeo, que viaje a Corea del Norte para continuar son sus gestiones a favor de la desnuclearización de la península; el mandatario argumento falta de progreso en los trabajos.
El anunció del mandatario confirmó reportes previos sobre la resistencia del régimen norcoreano a aceptar la demanda de Washington de abandonar tanto su programa nuclear, como el de misiles balísticos intercontinentales.
En julio pasado, Pompeo viajó a Corea del Norte como parte de sus gestiones para negociar el acuerdo, pero no fue recibido por el líder norcoreano Kim Jong-un, como estaba previsto.
La visita se mantuvo a pesar de los reportes de prensa que aseguran que Pyongyang ha continuado adelante con los trabajos relacionados a su programa nuclear y balístico.
Pese a los acercamientos y a gestos por parte del régimen norcoreano, como el retorno de los restos de soldados estadunidenses muertos en la guerra de Corea, la administración Trump dijo que mantendría la política de máxima presión, incluyendo sanciones.
La cancelación del viaje de Pompeo se produjo un día después de haber anunciado lo que sería su quinta visita Pyongyang, acompañado por Stephen Biegun, a quien nombró como representante especial para Corea del Norte.
Además, Trump hizo patente su malestar por la negativa de China para presionar a Corea del Norte a fin de que ceda a sus demandas, tras indicar: “no creo que nos estén ayudando”.
“El secretario Pompeo espera ir a Corea del Norte en el futuro cercano, con más seguridad después de que nuestra relación comercial con China sea resuelta. Mientras tanto, quiero enviar mis cálidos saludos y respeto al presidente Kim”, aseveró el mandatario.