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Evo histórico

En Europa, las monarquías vigentes celebran con pompa y circunstancia cada que uno de sus reyes o príncipes cumplen un año más en el trono. Hace poco, el reinado de Isabel II cumplió 63 años, convirtiéndose así en la jefa de Estado más longeva en la historia del Reino Unido.

Evo Morales apenas lleva 9 años, 8  meses y 26 días al frente del país sudamericano. 

“Tarde o temprano tendremos que reconocer que la Tierra tiene derechos también. Lo que la humanidad debe saber es que los seres humanos no pueden vivir sin la Madre Tierra, pero el planeta puede subsistir sin humanos”
Evo Morales Presidente de Bolivia
Morales inició su primer gobierno el 22 de enero de 2006 bajo la antigua Constitución Política del Estado. En 2009, con la nueva Carta Magna, fue elegido para gobernar de 2010-2015, y posteriormente reelegido para el período 2015-2020

En Europa, las monarquías vigentes celebran con pompa y circunstancia cada que uno de sus reyes o príncipes cumplen un año más en el trono. Hace poco, el reinado de Isabel II cumplió 63 años, convirtiéndose así en la jefa de Estado más longeva en la historia del Reino Unido.

Evo Morales apenas lleva 9 años, 8  meses y 26 días al frente del país sudamericano. 

En Bolivia, un país donde el 62 por ciento de la población se identifica con alguno de los pueblos nativos de ese territorio, los ciudadanos siguen pensando que Evo Morales – boliviano de origen indígena – es la persona que mejor los representa en la presidencia.

Críticos del gobierno se han pronunciado en contra de que la comunidad internacional siga refiriéndose a su actual presidente como el primer indígena en asumir ese cargo. Historiadores bolivianos insisten que Morales es mestizo y un presidente anterior – Andrés de Santa Cruz Calahumana – es en realidad el primer presidente con sangre indígena de Bolivia. 

Santa Cruz, sin embargo, fue un dictador y el voto popular nunca lo puso al frente del gobierno. Morales ha asumido el cargo tras ganar consecutivamente y de manera clara tres elecciones democráticas. 

El miércoles Evo Morales superó a Santa Cruz y se convirtió en el presidente que ha durado más tiempo gobernando a Bolivia. 

Para celebrar, Morales no salió a pasear en un carruaje en las calles de La Paz ni tampoco se lanzaron fuegos artificiales en su honor. 

El presidente de Bolivia agradeció a la Pachamama (La madre Tierra) en una ceremonia indígena en la ciudad de Tiahuanacu. Después pronunció un discurso donde felicitó a su equipo por el apoyo ofrecido.

El evento fue tachado de populista por sus detractores y en redes sociales se burlaron, una vez más, de lo ‘ridículo’ de su vestimenta y de la ceremonia. 

El presidente jamás tendrá la aprobación absoluta de sus ciudadanos. Hasta el final de su mandato, Morales será el salvador para unos (todavía la mayoría) y el populista anacrónico para otros. En Reino Unido la reina y el Primer Ministro (quien realmente gobierna a ese país) tienen el mismo problema. Hay quienes los aman y quienes los odian. 

Lo interesante de la situación de Morales es que se asume, por lo que dicen muchos críticos de su gobierno y aquellos que constantemente se mofan de los rasgos y los usos y costumbres del presidente boliviano, que las tradiciones europeas sí tienen suficiente legitimidad para ser conservadas, admiradas e incluso imitadas. 

Las tradiciones de origen prehispánico en América Latina solo se usan, de acuerdo a esta visión, de una manera ‘burda’ para hacerse de la aceptación popular y eventualmente ganar votos.

¿Hay culturas y gobiernos superiores a otros sólo por su origen geográfico o este fenómeno evidencia la poca auto estima cultural y política de la región? 

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