Panamá y Estados Unidos firmaron un acuerdo con la intención de repatriar a los migrantes irregulares del país centroamericano. De esta manera, Washington se encargará del costo de los vuelos al tiempo que el presidente José Raúl Mulino cerrará el Tapón del Darién, por el que cruzan las personas que toman rumbo al norte.
Este lunes, el Ministerio de Seguridad Pública de Panamá informó sobre cómo se hará a través de su cuenta de X, al puntualizar que “la intención de este acuerdo es permitir cerrar el paso de inmigrantes irregulares por Darién”, detalló.
Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, firmó el acuerdo durante su visita a Panamá con motivo de asistir a la investidura del nuevo presidente, José Raúl Mulino.
Por su parte, el nuevo presidente de Panamá, prometió durante su discurso que su país no funcionará como “tránsito” para migrantes a través de la selva de Darién.
Panamá y Estados Unidos firman la tarde de hoy lunes 1 de julio, un memorando de entendimiento sobre asistencia y cooperación en asuntos inmigratorios. La intención de este acuerdo, es permitir cerrar el paso de inmigrantes irregulares por Darién.🇵🇦🇺🇸 @frankabregom pic.twitter.com/pyMbONzrDf
— Ministerio de Seguridad Pública de Panamá (@MinSegPma) July 2, 2024
Estados Unidos repatriará migrantes
Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, informó en un comunicado que el gobierno del presidente Joe Biden “apoyará los esfuerzos para iniciar la repatriación rápida, segura y humana de los migrantes que carecen de una base legal para permanecer en Panamá”.
Asimismo, la funcionaria agregó que la repatriación de migrantes “ayudará a disuadir la migración irregular en la región y en nuestra frontera sur, y pondrá freno al enriquecimiento de las maliciosas redes de contrabando que se aprovechan de los migrantes vulnerables”.
De esta manera, Estados Unidos cubrirá el costo de los vuelos de aquellas personas migrantes que sean expulsadas de Panamá para que puedan volver a su país de origen.
Asimismo, el gobierno estadounidense capacitará a funcionarios de Panamá sobre cómo realizar las repatriaciones. También instruirán a las autoridades a evaluar a migrantes que sean elegibles para recibir protección. No obstante, aclararon que Estados Unidos no decidirá quiénes son deportados.
El programa de repatriación será responsabilidad exclusiva de Panamá y en apego a las leyes de inmigración de ese país. Estados Unidos no tomará decisiones, según afirmaron los funcionarios estadounidenses; únicamente brindarán financiamiento y capacitación.