Los padres de niños migrantes en Estados Unidos podrían tener una segunda oportunidad de ver a sus hijos. Tras la detención, separación y deportación que vivieron familias de ilegales, el gobierno estadounidense analizará la situación de cada uno.
La administración del presidente Donald Trump llegó ayer a un acuerdo sobre la separación de niños migrantes y sus padres en la frontera con Estados Unidos, que permitirá que algunas personas soliciten asilo en el país.
Según el plan, altos funcionarios de Washington anunciaron que si bien no tenían previsto recibir de vuelta a ningún padre que haya sido deportado, considerarían casos individuales en los que eso podría justificarse.
El acuerdo, que debe ser aprobado por el juez federal asignado al caso, derivó de la política “Tolerancia cero”, que dejó a miles de niños en centros de detención y separados de sus padres.
Antes de que se implementara esta política, toda persona ilegal que fuera detenida por las autoridades estadounidenses en la frontera norte, tenía el derecho a presentarse ante un juez para que éste autorizara, o no, si el indocumentado podría pedir asilo en el país.
Si se aprueba el plan actual, marcaría un paso importante en la resolución de la demanda interpuesta por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) en nombre de las familias separadas.
A principios de mayo, el presidente Trump intentó enjuiciar a todos los adultos que cruzaban la frontera sin autorización, incluidos los que viajan con niños, pero las separaciones familiares se terminaron el mes siguiente debido a las prepresalias en su contra.
Más de dos mil 300 niños fueron separados de sus padres al cruzar la fronterea de Estados Unidos de manera ilegal
La administración estadounidense anunció que más de dos mil 300 niños migrantes fueron separados de sus padres
Por su parte, el diario The New York Times informó que el total de los menores detenidos durante este mes fue de 12 mil 800. La mayoría de esos niños, de acuerdo al diario, cruzaron sin la compañía de un adulto.
Las consecuencias de Tolerancia cero
Además de las críticas a nivel mundial que recibió la administración del presidente Donald Trump por la implantación de la política “Tolerancia cero”, una de las consecuencias más graves que tuvo este método fue la enfermedad, e incluso casos de abusos sexual, que algunos niños sufrieron en algunos centros de detención.
El pasado 28 de julio, abogados que trabajan en el Centro de detención Residencial Familiar, al sur de Texas, denunciaron que algunos niños estaban horrorizados porque sufrieron violencia por parte de las autoridades que supuestamente cuidaban de ellos.
El 21 de junio, el Centro para los Derechos Humanos y Constitucionales de Los Ángeles, denunció que los niños eran obligados a consumir fármacos por órdenes de las autoridades del país norte.
El 30 de julio , el diario The Nation informó del caso de una niña de 6 años, originaria de Guatemala, que fue víctima de abuso sexual por parte de un niño mayor que ella, cuando se encontraban en Casa Glendale, un centro de detención en Phoenix, Arizona.
