Estados Unidos no ablandará sanciones contra Cuba a menos de un cambio de gobierno en la isla

Estados Unidos no removerá las sanciones contra Cuba a pesar de la opinión contraria de la comunidad internacional.

En total, 187 países de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) favorecieron a la isla, mientras que Ucrania se abstuvo del voto e Israel se manifestó en contra al igual que la Unión Americana.

La votación se llevó a cabo los días 1 y 2 de noviembre con la participación de Paul Folmsbee, representante de Estados Unidos, y Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Asuntos Exteriores de Cuba.

Folmsbee, por su parte, argumentó que la posición de su nación se debía a la falta de democracia y de derechos humanos en la isla al considerar que el pueblo cubano ha sido gobernado por el mismo grupo político desde la década de los 70.

Asimismo, desde años anteriores, la Unión Americana ha criticado la falta de libertad de expresión que tiene la sociedad cubana al ser reprimida por salir al manifestarse contra el gobierno en defensa de sus derechos.

Durante su exposición, Rodríguez Parrilla remarcó que las sanciones económicas, comerciales y financieras de Estados Unidos son “un acto de guerra económica en tiempos de paz” al impedir con ellas el acceso a medicamentos y equipos médicos, entre otros beneficios.

“No es legal ni ético que el gobierno de una potencia someta a una nación pequeña por décadas a una guerra económica incesante en aras de imponerle un sistema político ajeno y volver a apropiarse de sus recursos. Es inaceptable privar a un pueblo entero del derecho a la libre determinación, al desarrollo y al progreso humano”, dijo el funcionario cubano.

Esta no es la primera vez que la Asamblea General de la ONU debate sobre poner fin a las sanciones contra Cuba, lo hace desde 1992 sin tener éxito alguno y a pesar de la postura de la mayoría de los países participantes.

Después de Barack Obama, “es difícil” que otro presidente de Estados Unidos se acerque a Cuba

Al respecto, Norma Soto, internacionalista y docente de la Universidad La Salle, opina que es poco probable que Estados Unidos remueva las sanciones contra Cuba aun conociendo la perspectiva de la comunidad internacional y teniendo al frente del país a un gobierno demócrata.

Fue durante la administración de Barack Obama cuando Estados Unidos protagonizó uno de sus mayores acercamientos con la isla, en el cual participó el actual mandatario Joe Biden cuando era vicepresidente.

“Pese a que Joe Biden trabajó como mano derecha de Obama, estando en la presidencia cada quien toma sus propias decisiones y, por ahora, no creo que llegue otro jefe de Estado similar, veo difìcil que aparezca porque ninguno de los aspirantes ha manifestado ese apoyo a Cuba”, dice la académica.

Desde su punto de vista, la única manera de que Estados Unidos remueva las sanciones contra la isla es si hace cambios en materia de política interna que beneficien a la Unión Americana. Mientras eso no ocurra, la comunidad internacional podría seguir apoyando en lo que pueda al país comunista.

En entrevista, la maestra Soto explica que aunque hay países como México o la comunidad europea que ayudan a la isla con el reforzamiento de sus políticas comerciales y financieras, su ayuda puede verse reducida porque a su vez deben cuidar sus relaciones con Estados Unidos.

“Están cuidado sus intereses y tratando de mantener su buena relación con Estados Unidos, porque guste o no es una economía de la cual dependen demasiados países, por ello no hay un apoyo fuerte.

“El respaldo que se da en la Asamblea General es total porque es un foro de libertad de expresión donde se puede opinar; sin embargo, no hay una obligatoriedad para que se lleven a cabo las acciones, dejando todo en el discurso”, admite Soto.

La educación y el deporte son algunos de los sectores perjudicados por las sanciones de Estados Unidos

Con las represalias sobre Cuba, el ministro de Asuntos Exteriores de la isla aseguró que su país no puede adquirir de compañías estadounidenses ni de sus subsidiarias equipos, dispositivos y fármacos, teniendo que pagarlos a precios “exorbitanes” a terceros.

Entre los medicamentos que fabrica Estados Unidos y requiere Cuba son los requeridos para pacientes con cáncer, quienes en caso de tener los recursos propios pueden obtener el tratamiento con una visa humanitaria.

En materia educativa, la ONU dio a conocer mediante su informe de 2023 que en marzo de 2022 al mismo mes de este año los daños en el sector se estimaron en más de 75 millones de dólares por la dificultad de adquirir insumos con destino a la producción de libros, folletos y demás bienes didácticos impresos. Asimismo, los estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas no pueden acceder a más de 300 sitios de Internet en tanto estén bloqueados.

En la esfera del deporte, se habla de la presencia de políticas discriminatorias por parte de Estados Unidos. En el caso del béisbol, la isla argumenta que no ha sido posible alcanzar acuerdos entre la Federación Cubana y las Grandes Ligas norteamericanas al no apoyar a sus jugadores sin la necesidad de salir del país. En los casos de deportistas cubanos que viajaron al extranjero, demandan controles excesivos y xenófobos en aduanas y controles de migración internacionales.

El resto de los atletas y árbitros cubanos también han sufrido de retención de su dinero ganado en concepto de premios, dada la negativa de los bancos extranjeros a procesar los pagos correspondientes con destino a Cuba.

En conclusión, Cuba dio a conocer que de marzo de 2022 a febrero de este año, el bloqueo estadounidense causó daños estimados en el orden de cuatro mil 867 millones de dólares.

“Este monto es reflejo del impacto recrudecido del bloqueo sobre las exportaciones cubanas, principalmente en el sector turístico, la persecución a las operaciones bancario-financieras del país, los costos por reubicación geográfica del comercio, las afectaciones a la producción y los servicios que se prestan a la población y los obstáculos para acceder a tecnologías de avanzada”, informó la isla.