Estados Unidos y 10 países de América Latina siguen pidiendo claridad electoral en Venezuela

Gran parte de los gobiernos americanos continúan rechazando el respaldo de las autoridades de Venezuela a la supuesta victoria presidencial de Nicolás Maduro.

A través de un comunicado, 11 países (Argentina, Costa Rica, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay) rechazaron que el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela avalara la reelección de Maduro, lo cual se registró el pasado 22 de agosto.

El conjunto, los países especificaron que anteriormente habían manifestado el desconocimiento de la validez de la declaración del Consejo Nacional Electoral (CNE), luego de que se impidió el acceso a los representantes de la oposición al conteo oficial de votos, la no publicación de las actas y la posterior negativa a realizar una auditoría imparcial e independiente de todas ellas.

Los 11 Estados reiteraron en el oficio que solo una auditoría imparcial e independiente de los votos, que evalúe todas la actas, permitirá garantizar el respeto a la voluntad popular soberana y la democracia en Venezuela.

“Continuaremos insistiendo en el respeto a la expresión soberana del pueblo venezolano que el pasado 28 de julio se pronunció de manera pacífica y contundente. En igual sentido, expresamos nuestra profunda preocupación y rechazo por las violaciones a los derechos humanos perpetradas contra los ciudadanos que pacíficamente reclaman el respeto al voto”, concluyeron los gobiernos firmantes.

Ante el comunicado emitido el pasado 23 de agosto, la representante de la oposición venezolana, María Corina Machado, aseguró que está quedando claro que “el régimen se equivocó” y que “se acelera el proceso que cada día aísla y hunde más a Maduro”.

La Comisión Internacional de Derechos Humanos (CIDH) también se unió a la exigencia del cese a las prácticas violatorias de derechos humanos y a restablecer el orden democrático en Venezuela.

Del lado europeo, el grupo de los 27 sigue sin reconocer los resultados de las elecciones en el país petrolero. España, particularmente, difundió que no aceptará la supuesta victoria oficialista hasta que no se publiquen las actas electorales.

De acuerdo con la Organización de los Estados Americanos (OEA), el CNE proclamó a Maduro de manera apresurada, con base en un boletín parcial y emitido de forma oral, con números que evidenciaban imposibilidades matemáticas y sin presentar los resultados desagregados que, confirme con la ley, debe tabular mesa por mesa.